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Lisboa lleva tiempo experimentando un auge del turismo familiar. De hecho, también está pasando con los municipios ubicados en las proximidades, tal como demuestran los 5 pueblos de los que hablamos cuando explicamos qué ver cerca de Lisboa. En lo que respecta a la ciudad lisboeta, cada vez se dejan ver más familias con niños, lo cual no es de extrañar teniendo en cuenta lo disfrutable que llega a ser no solo para los adultos, sino también para los más pequeños de la casa.
Eso sí, para disfrutar al máximo de la experiencia, es fundamental que sepas qué ver en Lisboa con niños. Presta atención a las siguientes sugerencias: entre ellas seguro que encuentras varios planes que satisfarán al cien por cien vuestros gustos y necesidades, como por ejemplo el free tour, además del tour privado en un vehículo que suele entusiasmar a los peques:
👉 Free tour por Lisboa
👉 Tour privado por Lisboa en tuk tuk
Teleférico Parque das Nações
El teleférico de Lisboa está situado en el Parque das Nações, una moderna zona de la ciudad que se desarrolló para la Expo 98. El parque es una de las principales atracciones turísticas de Lisboa y ofrece una variedad de opciones de entretenimiento para todas las edades.
Recorre una distancia de aproximadamente 1,5 kilómetros, proporcionando vistas panorámicas del río Tajo y los impresionantes edificios modernos del Parque das Nações. Los niños disfrutarán de un emocionante paseo en las góndolas aéreas, desde donde podrán ver el paisaje urbano de Lisboa desde una perspectiva elevada y única.
A lo largo del recorrido, el teleférico tiene paradas en varios puntos de interés del Parque das Nações. Los niños pueden desembarcar en estas paradas y explorar las diversas atracciones del parque.
Con tal de pasároslo en grande en el teleférico, necesitaréis entradas que son bastante asequibles y que podéis comprar a través de este enlace:
👉 Entrada al teleférico de Lisboa
Estadio da Luz
El Estadio del Sport Lisboa e Benfica, comúnmente conocido como Estadio da Luz, es uno de los estadios de fútbol más emblemáticos de Lisboa y Portugal. Es el hogar del Benfica, uno de los clubes de fútbol más grandes y populares del país. Para los niños amantes del fútbol o simplemente interesados en vivir una experiencia deportiva emocionante, visitar el Estadio da Luz puede ser una experiencia inolvidable.
Fue inaugurado en 2003 y se encuentra en el barrio de São Domingos de Benfica, en el noroeste de Lisboa. Se construyó para reemplazar al antiguo Estadio da Luz y ha sido sede de importantes eventos deportivos, incluyendo partidos de la UEFA Champions League y la final de la Eurocopa 2004.
El estadio ofrece visitas guiadas que permiten a los visitantes, incluidos los niños, explorar las instalaciones, conocer la historia del club y experimentar el ambiente del estadio. Durante el recorrido, los guías proporcionan detalles interesantes sobre el equipo, sus logros y la pasión por el fútbol en Portugal. Los niños pueden sentirse como auténticos futbolistas mientras recorren el césped y se sientan en el banquillo de los jugadores.
👉 Tour por el Estadio del Benfica
Si tenéis tiempo y al peque le entusiasma el fútbol, podéis ir al otro estadio de la ciudad del que ya hablamos en el artículo sobre qué ver en Lisboa en 5 días. Nos referimos al José Alvalade, las instalaciones en las que juega el Sporting Club, máximo rival del Benfica.
3D Fun Art Museum
El museo presenta una colección de pinturas y esculturas en 3D que están diseñadas para crear la ilusión de profundidad y perspectiva. Los más pequeños de la casa pueden interactuar con estas obras de arte y posicionarse de manera que parezca que están formando parte de las escenas pintadas. Las pinturas en 3D están diseñadas con un alto nivel de detalle y realismo, lo que permite que los visitantes se sorprendan con las ilusiones ópticas que se generan al posar y tomar fotografías. Los niños se sentirán como si estuvieran en mundos fantásticos o situaciones cómicas mientras exploran el museo, factor que estimulará al máximo su creatividad e imaginación.
El «3D Fun Art Museum» ofrece una amplia variedad de escenarios y temáticas en sus pinturas, que van desde paisajes naturales y escenas urbanas hasta escenas de fantasía y películas. Una de las actividades más divertidas para los niños en este museo es tomarse fotografías creativas con las ilusiones ópticas. Los visitantes pueden jugar con las poses, perspectivas y ángulos para crear imágenes sorprendentes y únicas que seguramente serán un recuerdo especial del viaje.
Además de ser una experiencia de entretenimiento y diversión, este tipo de museo también puede ser una oportunidad educativa para los niños. Y no es para menos, puesto que aprenden sobre arte, perspectiva y cómo las ilusiones ópticas pueden engañar a nuestros sentidos. Es por ello que tantas mamás y papás no se lo piensan dos veces a la hora de comprar las entradas para acceder a dichas instalaciones:
👉 Entrada al 3D Fun Art Museum Lisboa
Oceanario de Lisboa
El Oceanario de Lisboa es uno de los destinos más populares para visitar con niños en la capital de Portugal. Situado en el Parque das Nações, zona de la que hemos hablado en anteriores párrafos, este impresionante acuario es una atracción que deleitará a toda la familia y ofrecerá una experiencia educativa y emocionante para los más pequeños.
Inaugurado en 1998, el Oceanario de Lisboa es uno de los acuarios más grandes y diversos de Europa. Su diseño distintivo se asemeja a un gran barco anclado en el río Tajo, lo que le otorga una apariencia única y atractiva. La estructura se divide en dos edificios principales: el edificio central, que alberga los acuarios principales, y el edificio periférico, que es el que cuenta con exposiciones temporales y áreas interactivas.
El acuario alberga cuatro hábitats principales que representan diferentes ecosistemas marinos del océano Atlántico, el océano Pacífico, el océano Índico y la Antártida. Cada hábitat se ha recreado con gran detalle y ofrece a los niños la oportunidad de sumergirse en la magia del mundo submarino. A través de inmensos paneles de cristal, los visitantes pueden contemplar una amplia variedad de especies marinas, desde majestuosos tiburones hasta coloridos peces tropicales.
En cuanto al tanque central, es el corazón del Oceanario, con 5 millones de litros de agua salada y una profundidad de varios metros. En este inmenso acuario, los niños podrán observar de cerca especies emblemáticas como rayas, barracudas, atunes y tiburones. Hay varias plataformas y niveles que ofrecen diferentes perspectivas del tanque, lo que permite a los visitantes ver cómo los animales nadan a su alrededor y se desenvuelven en su entorno natural.
Por si fuera poco, el Oceanario de Lisboa ofrece una variedad de actividades y espectáculos interactivos para niños. Los educadores marinos realizan charlas y presentaciones en vivo donde explican detalles interesantes sobre las diferentes especies y los ecosistemas marinos. Los niños también pueden tocar algunas especies marinas en los tanques táctiles, lo que les permite una experiencia más cercana con animales marinos inofensivos. Vivirla es posible simplemente comprando las entradas online:
👉 Entrada al Oceanario de Lisboa
Además de las exposiciones permanentes, el Oceanario de Lisboa presenta regularmente exposiciones temporales con temas relacionados con la vida marina y la conservación de los océanos. Estas exhibiciones cambiantes agregan un toque de novedad y permiten a los niños aprender sobre temas actuales y relevantes relacionados con el mundo acuático.
El Oceanario de Lisboa tiene un enfoque significativo en la conservación y la sostenibilidad marina. A través de su trabajo educativo y programas de conservación, el acuario busca concienciar a los visitantes, especialmente a los peques, sobre la importancia de proteger los océanos y sus habitantes. Los esfuerzos del Oceanario incluyen la promoción de prácticas pesqueras sostenibles, la reducción del consumo de plástico y la protección de especies en peligro de extinción.
Las instalaciones están bien adaptadas para recibir a familias con niños. Dispone de áreas de descanso, instalaciones para cambiar pañales y restaurantes donde se pueden adquirir comidas y meriendas. Además, hay una tienda de regalos que ofrece una selección de productos relacionados con la vida marina y recuerdos del acuario.
Playa de Carcavelos
La Playa de Carcavelos, ubicada en la costa de Lisboa, es una de las playas más populares y emblemáticas de la región, especialmente para las familias con niños. Situada a unos 15 kilómetros al oeste del centro de Lisboa, esta extensa playa de arena dorada y aguas cristalinas ofrece un entorno seguro y entretenido para que los niños disfruten de un día lleno de diversión bajo el sol.
Es fácilmente accesible desde el centro de Lisboa mediante transporte público o en coche. Se encuentra en el municipio de Cascais y cuenta con excelentes conexiones de transporte. Los trenes salen regularmente desde la estación de Cais do Sodré en Lisboa y tardan aproximadamente 30 minutos en llegar a la estación de Carcavelos, que está a pocos pasos de la playa.
A lo largo del paseo marítimo, encontrarás numerosos restaurantes, cafeterías y bares que ofrecen una variedad de opciones gastronómicas, desde platos tradicionales portugueses hasta opciones internacionales. También hay tiendas donde puedes comprar artículos de playa y juguetes para los niños.
Carcavelos es conocida por sus excelentes condiciones para practicar deportes acuáticos, como el surf y el bodyboard. Si tus hijos son un poco mayores y tienen interés en aprender a surfear, hay escuelas de surf que ofrecen clases para principiantes y para niveles más avanzados. Los monitores son expertos en su campo y garantizarán la seguridad de los niños mientras aprenden y se divierten en las olas:
👉 Curso de surf en la playa de Carcavelos
Además del surf, los niños pueden disfrutar de construir castillos de arena en la orilla, jugar al voleibol de playa o dar largos paseos por la orilla mientras recogen conchas marinas. Es importante tener en cuenta que las corrientes pueden ser fuertes en ciertas áreas de la playa, así que siempre es aconsejable supervisar a los peques mientras están en el agua.
