Menorca

¿Qué ver en Menorca en 7 días?

Las Islas Baleares son una Comunidad Autónoma con mucho encanto gracias a zonas como Menorca. Aunque dicha isla cuenta con una superficie de 696 kilómetros cuadrados, es posible visitarla en solo una semana días. Eso sí, para ello necesitas una buena planificación como la que verás a continuación.

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Día 1

Por la mañana

Empieza el día por todo lo alto yendo a Fornells. Conocido por su belleza natural y su ambiente tranquilo, Fornells atrae a turistas que buscan disfrutar de sus playas, su deliciosa gastronomía y su rica herencia histórica.

El pueblo en sí tiene un encanto pintoresco, con calles estrechas y empedradas, casas blancas y pequeñas tiendas de artesanía. Los restaurantes del puerto son famosos por sus deliciosos platos de mariscos y pescados frescos, especialmente la caldereta de langosta, un guiso típico de la región.

Desde el punto de vista cultural, Fornells alberga el Castillo de Sant Antoni, una fortaleza del siglo XVII que se encuentra en lo alto de una colina. Esta antigua fortificación ofrece vistas panorámicas impresionantes de la bahía y sus alrededores, y es un lugar interesante para aprender sobre la historia de la zona.

Una de las características más destacadas de Fornells es su impresionante puerto natural, que se extiende a lo largo de una amplia bahía. Este puerto es un lugar popular para los amantes de los deportes acuáticos, como la vela, el windsurf y el kayak, ya que sus aguas tranquilas y protegidas ofrecen condiciones ideales. Es por ello que Fornells es uno de los lugares de los que hablamos en este mismo blog cuando publicamos un artículo sobre qué ver en Menorca con niños. De hecho, actividades como las siguientes suelen gustarles mucho, así como las otras de las que hablamos en el artículo de qué ver en Fornells.

👉 Paddle surf en Fornells
👉 Alquiler de barco con patrón en Fornells

Vista de Fornells desde el Monte Toro | Foto de Mac9, CC BY 3.0, via Wikimedia Commons

Para comer

Sallagosta es un muy buen restaurante en el que podrás comer en Fornells. Más allá de la calidad de sus platos y del servicio en general, también destaca por las bonitas vistas que ofrece a todos los comensales.

Por la tarde

Si visitas Menorca tan solo un día, el Monte Toro es uno de los lugares que no te puedes perder. Se trata de la montaña más alta de la isla de Menorca, situada en el centro geográfico de la isla. Con una altitud de aproximadamente 358 metros, el Monte Toro ofrece vistas panorámicas espectaculares de la isla y sus alrededores.

En la cima del Monte Toro se encuentra el Santuario de la Virgen del Toro, un lugar de peregrinación y devoción religiosa. El santuario alberga una estatua de la Virgen María, patrona de Menorca, y es un sitio popular para los residentes y visitantes que desean disfrutar de la tranquilidad del entorno y contemplar las impresionantes vistas.

Además de su valor religioso, el Monte Toro también es un lugar de interés natural y turístico. Hay una carretera que lleva hasta la cima, lo que facilita el acceso para los visitantes. A lo largo del camino, se pueden observar una variedad de flora y fauna característica de la isla de Menorca.

Monte Toro | Foto de Gabriel Vidal, dominio público, via Wikimedia Commons

Por la noche

Cuando al día le quede poco para terminar, será un buen momento para hacer acto de presencia en la Cala Galdana. Es una de las calas más masificadas, así que agradecerás no ir en hora punta. De hecho, podrás disfrutar de un atardecer que difícilmente olvidarás:

👉 Paseo en barco al atardecer por Cala Galdana

La playa de Cala Galdana está enmarcada por acantilados cubiertos de vegetación mediterránea, creando un entorno idílico y relajante. Sus aguas son turquesas y transparentes, lo que la convierte en un lugar perfecto para disfrutar de un baño refrescante o practicar deportes acuáticos como el snorkel y el kayak.

La cala cuenta con una amplia franja de arena blanca y fina, ideal para tomar el sol y relajarse. Además, sus aguas suelen ser tranquilas y poco profundas, lo que la hace adecuada para familias con niños pequeños.

En los alrededores de Cala Galdana, hay servicios y comodidades para los visitantes, como restaurantes, bares, tiendas y alquiler de equipamiento acuático. Esto hace que la experiencia en la playa sea aún más cómoda y agradable.

Además de disfrutar de la playa, Cala Galdana también ofrece la posibilidad de explorar sus alrededores naturales. Hay senderos costeros que llevan a calas cercanas, como Macarella y Macarelleta, que son igualmente impresionantes y valen la pena visitar.

Cala Galdana | Foto de MontanNito, dominio público, via Wikimedia Commons

Para cenar

A pie de playa se ubica un bar restaurante muy recomendable: Aquario. Generalmente los locales con tan buenas vistas y en una ubicación privilegiada suelen ser bastante caros, pero no es el caso que nos ocupa, ya que los precios son más que razonables.


Día 2

Por la mañana

¿Recuerdas que antes hemos mencionado Cala Macarella y Macarelleta? Si Cala Galdana está magnificada, estas dos no se quedan atrás. Es por esto que conviene empezar el día muy pronto para llegar de buena mañana a Cala Macarella. Más adelante, en caso de que sigas andando por el correspondiente camino, llegarás a Macarelleta: una cala similar pero de menores dimensiones.

Estas calas son consideradas verdaderos tesoros naturales y son apreciadas por su belleza escénica y aguas cristalinas. Sus aguas son turquesas y transparentes, invitando a los visitantes a sumergirse y disfrutar de un refrescante baño. Además, están protegidas del viento y las olas, creando un entorno tranquilo y apacible. El agua está tan limpia que es habitual dar con muchos turistas y ciudadanos menorquines practicando snorkel:

👉 Snorkel en Macarella y Cala Trebalúger

Tanto Cala Macarella como Macarelleta son ideales para los amantes de la naturaleza y aquellos que buscan playas tranquilas y pintorescas. Su belleza virgen y entorno natural las convierten en destinos populares para los turistas y locales que desean disfrutar de un entorno paradisíaco.

Cala Macarella | Foto de Sandro3coma14, CC BY 4.0, via Wikimedia Commons

Para comer

A no mucha distancia se encuentran emplazados varios restaurantes. Entre todos ellos, te recomendamos fervientemente uno especializado en cocina menorquina. Se trata de Es Barranc.

Por la tarde

Aprovecha la tarde para adentrarte en el yacimiento de Son Catlar. Se encuentra en la costa norte de la isla, cerca de la localidad de Ciutadella de la que hablaremos después. Son Catlar es considerado uno de los asentamientos talayóticos más destacados y mejor conservados de Menorca.

El yacimiento de Son Catlar comprende los restos de un antiguo poblado talayótico, que se remonta al período comprendido entre el 1000 y el 300 a.C. Los talayots son construcciones megalíticas características de la cultura prehistórica de las Islas Baleares. Son Catlar cuenta con varios talayots, estructuras de piedra en forma de torre que servían como viviendas, fortificaciones o torres de vigilancia.

Además de los talayots, en Son Catlar se pueden encontrar otros elementos arquitectónicos como murallas, viviendas, pozos y almacenes. Estos restos proporcionan información invaluable sobre la vida y las prácticas de la cultura talayótica en Menorca.

El yacimiento ha sido objeto de numerosas investigaciones arqueológicas y excavaciones, lo que ha permitido descubrir artefactos y objetos de la vida cotidiana de la época, como cerámicas, herramientas de piedra y restos de animales. Estos hallazgos han contribuido a comprender mejor la historia y el desarrollo de la cultura talayótica en Menorca.

Son Catlar ofrece la posibilidad de realizar visitas guiadas para conocer en detalle los vestigios arqueológicos y aprender sobre la vida de sus antiguos habitantes. La visita al yacimiento permite sumergirse en el pasado de la isla y apreciar la importancia histórica y cultural de la civilización talayótica:

👉 Visita guiada por el yacimiento de Son Catlar

Puerta de entrada de la muralla del poblado prehistórico de Son Catlar | Foto de Sa monea, CC BY-SA 3.0, via Wikimedia Commons

Por la noche

Pasear por la noche por Ciutadella es un placer indescriptible, aunque lo cierto es que la experiencia se disfruta al máximo sea cual sea el momento del día en que lleves a cabo dicha actividad. Incluso se organizan tours privados que no te dejarán indiferente, ya que te llevarán a descubrir los puntos más atractivos de la zona:

👉 Tour privado por Ciudadela

La ciudad cuenta con un casco antiguo bien conservado y laberíntico, repleto de calles empedradas, plazas pintorescas y edificios históricos. Pasear por las estrechas calles de Ciutadella es como retroceder en el tiempo, ya que conserva gran parte de su arquitectura medieval y renacentista. La Catedral de Santa María, situada en la Plaza de la Catedral, es uno de los principales puntos de interés de la ciudad. Esta majestuosa catedral gótica del siglo XIII es un verdadero símbolo de Ciutadella.

Además de su patrimonio arquitectónico, Ciutadella cuenta con un animado puerto deportivo y una amplia selección de restaurantes, bares y tiendas. Los visitantes pueden disfrutar de la auténtica cocina menorquina. Las tiendas locales ofrecen productos artesanales, como calzado de cuero y joyas, que reflejan la identidad y la tradición de Menorca.

Ciutadella también es conocida por sus celebraciones festivas. Las fiestas de Sant Joan, que tienen lugar a finales de junio, son especialmente destacadas. Durante esta festividad, las calles de la ciudad se llenan de coloridos desfiles, música, danzas tradicionales y eventos emocionantes, como las célebres «jaleo», donde los jinetes montan a caballo y hacen exhibiciones de equitación en la Plaza del Born. Para aprovechar al máximo la visita, no dudes en informarte sobre qué ver en Ciutadella.

Ciutadella | Foto de Lanoel, CC BY 3.0, via Wikimedia Commons

Para cenar

Son innumerables los restaurantes que hay en Ciutadella. Sería imposible quedarnos con uno solo, así que vamos a recomendarte un par de ellos que presumen de una buena relación calidad precio: Mr Beps y Sa Torreta de Can Rafa.


Día 3

Por la mañana

Tras explorar Ciutadella el día anterior, llega el momento de hacer lo propio con Mahón. ¿No sabes por dónde empezar? Entonces consulta nuestro artículo en el que explicamos qué ver en Mahón. Una buena idea para el tercer día es empezarlo haciendo un free tour, el cual termina en la zona más céntrica de la ciudad:

👉 Free tour por Mahón

Independientemente de si optas por apuntarte a un tour o prefieres ir a tu propio ritmo, te aconsejamos empezar por la Iglesia de Santa María. Situada en la plaza de la Constitución, es uno de los principales monumentos de Mahón. Esta iglesia gótica fue construida en el siglo XIII y presenta una impresionante fachada y un campanario que domina el paisaje urbano.

A continuación, dirígete al ayuntamiento. Ubicado en la misma plaza de la Constitución, el Ayuntamiento de Mahón es un edificio emblemático. Su fachada neoclásica es imponente y destaca por su elegancia arquitectónica. En el interior, se encuentra una escalinata monumental y diferentes salas de interés histórico.

También es aconsejable visitar el Bastión de Sant Roc. Este es uno de los baluartes defensivos que rodean el puerto de Mahón. Construido en el siglo XVIII, ofrece unas vistas espectaculares del puerto y la ciudad. Actualmente, alberga el Museo Militar de Menorca, donde se exhiben armas antiguas, uniformes y otros objetos históricos.

Vista aérea de Mahón | Foto de Arjuno3, CC BY 4.0, via Wikimedia Commons

Para comer

Es difícil calcular la cantidad de restaurantes que hay en Mahón, pero como te puedes imaginar, no todos merecen la pena. Entre los que sí recomendamos se encuentran Ses Forquilles y Can Xavi, siendo este último un poco más asequible.

Por la tarde

Al caer la tarde, cuando ya no habrá tanta gente como es habitual, aprovecha para hacer acto de presencia en Cala Mesquida. Se trata de una playa de arena fina y blanca, rodeada de dunas y pinos. El paisaje que la rodea es virgen y natural, con colinas verdes y acantilados escarpados. Las aguas son transparentes y de un tono turquesa intenso, lo que la convierte en un lugar ideal para el buceo y el snorkel.

Cala Mesquida forma parte del Área Natural de Especial Interés de Cap de Favàritx, una zona protegida de gran valor ecológico. Esto significa que se han tomado medidas para preservar su belleza natural y su diversidad biológica.

Además de disfrutar de la playa, Cala Mesquida ofrece muchas oportunidades para actividades al aire libre. Puedes explorar los senderos que recorren la zona y disfrutar de caminatas escénicas por los alrededores. También es un lugar popular para la práctica de deportes acuáticos como el windsurf y el kayak.

La zona que rodea Cala Mesquida está cubierta de una vegetación mediterránea característica, con pinos, sabinas y arbustos de matorral. En cuanto a la fauna, es posible ver aves marinas, como gaviotas y cormoranes, así como diversas especies de peces en las aguas que podrás surcar si te apuntas a este plan:

👉 Paseo en barco por el este de Menorca

Carretera que da acceso a la Cala Mesquida | Foto de Alejandro Muñoz Cabrisas, CC BY 4.0, via Wikimedia Commons

Por la noche

Cuando el sol se ponga, podrás deleitarte con un espectacular atardecer desde la Torre de Sa Mesquida. Es una antigua torre de defensa que se encuentra en la costa noreste de la isla de Menorca. Esta torre forma parte del sistema de torres de defensa que se construyeron en Menorca durante los siglos XVIII y XIX para proteger la isla de ataques piratas y enemigos.

La torre se encuentra en un promontorio rocoso cerca de la localidad de Es Castell, ofreciendo vistas panorámicas del mar Mediterráneo. Es una torre de planta circular construida con piedra caliza y presenta una altura considerable. Su diseño simple pero robusto refleja su función defensiva.

Su construcción se llevó a cabo en el año 1801, durante el dominio británico de la isla. Junto con otras torres de defensa, tenía como objetivo proteger la costa de posibles ataques marítimos. Durante ese período, Menorca era un importante punto estratégico en el Mediterráneo.

La función principal de la Torre de Sa Mesquida era detectar y advertir sobre la presencia de barcos enemigos. Una vez avistados, se emitían señales visuales para alertar a otras torres cercanas y a los soldados estacionados en fortificaciones próximas, preparándose así para la defensa de la isla.

Aunque la torre ha perdido su función defensiva original, se ha conservado en buen estado a lo largo de los años. Actualmente, la Torre de Sa Mesquida es un sitio histórico y turístico que se puede visitar. Desde su ubicación elevada, ofrece unas vistas impresionantes del paisaje costero y del mar circundante.

Torre de Sa Mesquida | Foto de JoRobot, CC BY-SA 2.0, via Wikimedia Commons

Para cenar

El Bar Sa Mesquida ofrece una excelente relación calidad precio. No encontrarás otro restaurante mejor en este sentido para cenar cerca de allí. Sirven pescado fresco de buena calidad. Desde TipsViajeros te recomendamos la tarta de queso… ¡exquisita!


Día 4

Por la mañana

Es Castell es el lugar más indicado para visitar en el cuarto día de tu aventura turística por Menorca. Está situado cerca del Puerto de Mahón, uno de los puertos naturales más grandes del mundo. El pueblo tiene una rica historia que se remonta a la ocupación británica de Menorca en el siglo XVIII. Durante ese tiempo, el pueblo fue fundado por los británicos y se le dio el nombre de Georgetown. Aún hoy, se pueden ver influencias británicas en su arquitectura y diseño urbano, con calles ordenadas y edificios de estilo georgiano. La Fortaleza de Marlborough, una antigua fortificación construida por los británicos, es un importante punto de interés histórico en el pueblo.

Una de las atracciones más destacadas de Es Castell es el puerto de Cales Fonts. Es un encantador puerto pesquero que cuenta con una variedad de restaurantes, bares y tiendas. Pasear por el puerto, disfrutar de una comida frente al mar y admirar las coloridas embarcaciones es una experiencia encantadora. El ambiente tranquilo y pintoresco del puerto hace que sea un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la belleza del entorno.

Es Castell también es conocido por sus fiestas tradicionales y populares. Las de San Juan, que se celebran a finales de junio, son uno de los eventos más destacados. Durante este evento, el pueblo se llena de música, bailes, desfiles y actividades culturales. Es un momento perfecto para sumergirse en la cultura local y disfrutar del ambiente festivo.

El pueblo conserva su carácter tranquilo y auténtico, alejado del bullicio turístico. Pasear por sus calles estrechas, visitar la plaza principal y descubrir sus encantadoras tiendas y cafés es una experiencia relajante y agradable. El ambiente acogedor y la amabilidad de los lugareños hacen que Es Castell sea un lugar encantador para explorar y disfrutar de la vida cotidiana de la isla.

Amanecer en Es Castell | Foto de Travelinho, CC BY-SA, via Wikimedia Commons

Para comer

Al ser una localidad muy turística, es fácil dar con todo tipo de restaurantes en Es Castell. El conocido como S’Arravalo es de los mejores, tal como indican sus reseñas en Google. Calidad de la comida, servicio rápido, comodidad del local… absolutamente todo es bueno.

Por la tarde

Tras una buena comilona en el S’Arravalo de Es Castell, pon rumbo a Es Grau. Estamos ante un encantador pueblo costero situado en la costa norte de la isla de Menorca. Rodeado de un entorno natural excepcional, Es Grau se encuentra dentro del Parque Natural de S’Albufera des Grau, un área protegida de gran belleza y biodiversidad.

El principal atractivo de Es Grau es su hermosa playa de aguas cristalinas y arena blanca. La playa de Es Grau es amplia, tranquila y cuenta con un suave declive, lo que la convierte en un lugar ideal para familias y para nadar. Además, la playa está rodeada por un entorno natural de dunas y pinares, creando un paisaje de gran belleza.

El Parque Natural de S’Albufera des Grau, que rodea a Es Grau, es una reserva de gran importancia ecológica. Es el hogar de una amplia variedad de especies de aves, como flamencos, garzas y águilas pescadoras, así como de otros animales y plantas autóctonas. Los visitantes pueden explorar el parque a través de senderos bien señalizados y disfrutar de la observación de aves y la flora y fauna local.

Es Grau tiene un ambiente tranquilo y relajado. Las casas blancas y los estrechos callejones crean un encanto pintoresco y auténtico. También es un punto de partida para excursiones en barco a la Isla d’en Colom, una pequeña isla frente a la costa. La Isla d’en Colom es un refugio natural con playas vírgenes y calas tranquilas, perfectas para explorar en un ambiente más salvaje. Llegar a ellas es posible apuntándote a este traslado:

👉 Traslado en lancha a la isla de Colom desde Es Grau

Es Grau | Foto de Discasto, CC BY 4.0, via Wikimedia Commons

Por la noche

Durante el transcurso de la noche, te lo pasarás en grande paseando por Alaior. Conocido por su rica historia y su hermoso entorno, Alaior es un lugar que combina el encanto tradicional de un pueblo menorquín con una gran variedad de servicios y comodidades para los visitantes.

El centro histórico de Alaior está lleno de calles estrechas y empedradas que conducen a una plaza central encantadora. Aquí, los visitantes pueden explorar edificios antiguos, como la Iglesia de Santa Eulalia, que data del siglo XIV, y el Ayuntamiento, un hermoso edificio de estilo neoclásico. Pasear por las estrechas calles del pueblo permite descubrir casas tradicionales con bonitos detalles arquitectónicos y disfrutar de la tranquilidad y la atmósfera relajada.

Alaior también es conocido por su artesanía y su producción de calzado tradicional menorquín, conocido como «abarcas». Los visitantes pueden visitar tiendas y talleres donde se fabrican estas icónicas sandalias de cuero, y algunos establecimientos incluso ofrecen la oportunidad de personalizar y comprar su propio par.

Además de su encanto histórico, Alaior cuenta con una gran variedad de servicios y comodidades modernas. El pueblo alberga una gran cantidad de restaurantes, bares y cafeterías donde los visitantes pueden disfrutar de la deliciosa gastronomía local y probar platos típicos de Menorca. También hay tiendas, supermercados y otros servicios para satisfacer las necesidades de los residentes y los turistas.

Vista aérea de Alaior | Foto de Paucabot, CC BY 4.0, via Wikimedia Commons

Para cenar

Precisamente en los restaurantes a los que hacíamos referencia antes es posible gozar de una buena cena. Antes de decantarte por alguno de ellos, consulta las opiniones en Google para asegurarte de que tomas una buena decisión.


Día 5

Por la mañana

Aprovechando que habrás hecho noche en Alaior o en las proximidades, visita el yacimiento de Torre d’en Galmés que está muy cerca de allí. Es uno de los tesoros históricos más importantes de Menorca y se encuentra en el municipio de Alaior. Se trata de un espacio arqueológico fascinante que ofrece una visión de la vida en la isla durante la época talayótica, que abarca desde el año 1000 a.C. hasta la dominación romana.

El yacimiento se extiende en una amplia área y cuenta con una serie de estructuras y construcciones talayóticas. Entre ellas, destaca una torre defensiva de piedra que se alza imponente en lo alto de una colina. Esta torre es una de las mejor conservadas de Menorca y proporciona una idea de la arquitectura y las técnicas de construcción de la época.

Además de la torre, en el yacimiento se pueden encontrar restos de viviendas, talayots (torres de piedra), recintos amurallados, espacios ceremoniales y sepulcros. Estos elementos muestran la complejidad de las sociedades talayóticas y su organización social. Explorar el yacimiento de Torre d’en Galmés es como dar un paso atrás en el tiempo. Los visitantes pueden pasear por los antiguos caminos de piedra y contemplar las estructuras que han sobrevivido durante siglos. Además, se pueden admirar las vistas panorámicas de la campiña menorquina desde lo alto de la torre. Teniendo en cuenta todo lo que se puede hacer allí, es aconsejable apuntarse a una visita guiada:

👉 Visita guiada por el yacimiento de Torre d’en Galmés

Torre d’en Galmés | Foto de Ivan_bea, dominio público, via Wikimedia Commons

Para comer

En el bar Escacs podrás degustar varias tapas a precios más que razonables. Si prefieres platos más abundantes, en el restaurante conocido como Es Festuc comerás de maravilla.

Por la tarde

Cuando llegue la tarde, ve a Puerto Addaya. El puerto se encuentra en una ubicación estratégica en la bahía de Addaya, rodeado de un entorno tranquilo y pintoresco. Con sus aguas cristalinas y su paisaje costero de ensueño, Puerto Addaya es ideal para aquellos que deseen relajarse y disfrutar de la belleza del mar.

El puerto ofrece una amplia variedad de servicios para los amantes de la navegación. Cuenta con amarres para embarcaciones de diferentes tamaños, así como con instalaciones para el suministro de combustible y agua. También hay empresas de alquiler de embarcaciones y escuelas de vela que permiten a los visitantes explorar la costa y disfrutar de actividades acuáticas como el buceo, el snorkel y la pesca.

La zona alrededor de Puerto Addaya también es un lugar popular para los amantes de la naturaleza. Hay rutas de senderismo y ciclismo que permiten explorar el paisaje costero y disfrutar de la flora y fauna autóctonas de Menorca.

Puerto Addaya | Foto de Andrés Nieto Porras, CC BY 2.0, via Wikimedia Commons

Por la noche

Ya es de noche, así que llega el momento de disfrutar al máximo de otra zona muy recomendable de Menorca: Es Mercadal. El centro histórico de Es Mercadal está lleno de calles empedradas y casas tradicionales de piedra, lo que le otorga un encanto pintoresco. Pasear por sus calles permite descubrir edificios históricos, como la iglesia parroquial de San Martín, que data del siglo XVIII, y el antiguo mercado, que ahora alberga tiendas y restaurantes.

Es Mercadal también es conocido por sus festividades tradicionales. Durante el verano, se celebran fiestas populares en honor a los patrones del pueblo, donde es posible presenciar bailes folclóricos, desfiles y otras manifestaciones culturales.

El municipio es famoso por su gastronomía. El pueblo es conocido por sus deliciosos productos locales, como el queso de Mahón, los embutidos y los dulces típicos de la isla. Los visitantes pueden disfrutar de una amplia variedad de restaurantes y bares que ofrecen platos tradicionales y cocina mediterránea, así como saborear los productos locales en las tiendas especializadas.

Es Mercadal | Foto de Nicolas G. Mertens, CC BY 4.0, via Wikimedia Commons

Para cenar

En estos restaurantes cenarás de lujo sin que la cuenta suba en exceso. Un claro ejemplo es el de Ca N’Olga, del cual te recomendamos fervientemente tanto el risotto como el pastel de espinacas.


Día 6

Por la mañana

El sexto y penúltimo día da comienzo de manera inmejorable, ya que estarás en un lugar paradisíaco: Arenal d’en Castell. La playa de Arenal d’en Castell es amplia y de forma semicircular, rodeada por colinas cubiertas de vegetación mediterránea. Sus aguas tranquilas y poco profundas la convierten en un lugar ideal para nadar y disfrutar de actividades acuáticas como el snorkel y el paddleboarding. Además, cuenta con servicios como tumbonas y sombrillas para aquellos que buscan relajarse y disfrutar del sol.

Junto a la playa se encuentra un animado paseo marítimo con una variedad de restaurantes, bares y tiendas. Los visitantes pueden disfrutar de una comida o una bebida refrescante con vistas al mar y luego dar un paseo por el paseo, disfrutando del ambiente animado y relajado.

Arenal d’en Castell también es un lugar popular para familias, ya que cuenta con instalaciones y servicios para los más pequeños, como parques infantiles y áreas de juegos en la playa. Además, hay empresas de alquiler de equipos acuáticos y excursiones en barco que ofrecen actividades para toda la familia.

La ubicación de Arenal d’en Castell en la costa norte de Menorca también lo convierte en un punto de partida idóneo para explorar otras playas y lugares de interés cercanos. Cala Pregonda y Cala Torta, dos playas impresionantes y vírgenes, se encuentran a poca distancia en coche y son ideales para aquellos que buscan una experiencia más tranquila y apartada.

Arenal d’en Castell | Foto de RD_Elsie, CC BY 2.0, via Wikimedia Commons

Para comer

El Mirador es el mejor restaurante de la zona al que puedes ir para comer en el sexto día de tu periplo turístico por el territorio menorquín. Más allá de su calidad gastronómica y del precio bastante ajustado que tienen sus platos, destacan sobre todo las privilegiadas vistas que ofrece a los clientes.

Por la tarde

¿Recuerdas que antes hemos mencionado Cala Pregonda? Aprovechando que está tan cerca de Arenal d’en Castell, ahora toca ir a esta bonita playa. Esta cala es conocida por su belleza natural y su entorno virgen, que la convierten en un lugar popular para aquellos que buscan disfrutar de la tranquilidad y la serenidad del mar.

Lo que hace que Cala Pregonda sea tan especial es su paisaje único. La playa está rodeada de colinas rocosas, con impresionantes acantilados y formaciones rocosas que contrastan con la arena dorada y el agua turquesa. Además, la playa cuenta con pequeñas islas e islotes cercanos.

Cala Pregonda ofrece una experiencia de playa diferente a la de otras partes de la isla. No tiene servicios turísticos como tumbonas o restaurantes, factor que la convierte en un lugar más tranquilo y menos concurrido. Es perfecta para aquellos que desean disfrutar de un entorno natural intacto y desconectarse del bullicio de la vida cotidiana.

Se trata también de un destino popular para los amantes del buceo y el snorkel. Sus aguas transparentes y sus fondos marinos ofrecen la posibilidad de explorar la vida marina y descubrir hermosos arrecifes y formaciones rocosas submarinas.

El acceso a Cala Pregonda no es tan fácil como a otras playas más populares de Menorca. Se requiere caminar por un sendero que atraviesa una zona rocosa y boscosa durante aproximadamente 20-30 minutos. Sin embargo, el esfuerzo vale la pena cuando se llega a esta playa impresionante y se tiene la oportunidad de disfrutar de sus aguas cristalinas y su entorno virgen.

Cala Pregonda | Foto de Jle1bat, CC BY 3.0, via Wikimedia Commons

Por la noche

La penúltima noche en Menorca termina en Ferrerías. El pueblo de Ferrerías se caracteriza por sus estrechas calles empedradas, casas encaladas y plazas acogedoras. Pasear por sus pintorescas calles permite descubrir la arquitectura tradicional menorquina y disfrutar del ambiente relajado de la vida local. Además, Ferrerías cuenta con una serie de tiendas, restaurantes y bares donde los visitantes pueden disfrutar de la gastronomía local y adquirir productos artesanales. Si eres amante de los vinos, es muy recomendable que te apuntes a esta actividad:

👉 Degustación de vinos y quesos en Hort Sant Patrici

Uno de los atractivos más destacados de Ferrerías es su historia relacionada con la industria del hierro. En el pasado, el pueblo fue un importante centro de producción de hierro, y se pueden encontrar vestigios de esta actividad en diferentes puntos del pueblo. Un ejemplo notable es la Casa de los Capellanes, una antigua casa señorial que ahora alberga el Museo del Molí de Dalt, donde es posible aprender sobre la historia de la producción de hierro y su importancia en la economía local.

Ferrerías | Foto de Josefito123, CC BY 4.0, via Wikimedia Commons

Para cenar

Si quieres cenar bien y a un precio realmente atractivo, no te lo pienses dos veces: La Viajera. No hay otro restaurante mejor por la zona. Además, su decoración es cálida, acogedora y confortable a partes iguales.


Día 7

Por la mañana

La semana turística empieza a llegar a su fin, pero todavía queda todo un día por delante, así que sácale partido visitando Cala Morell. La cala está rodeada de acantilados y formaciones rocosas, creando un entorno impresionante y pintoresco. Las aguas cristalinas de color turquesa contrastan con las rocas de tonos cálidos, creando un contraste visual cautivador.

Es pequeña pero encantadora, con arena dorada y aguas transparentes. Aunque no es tan extensa como otras playas de la isla, su belleza natural y su ambiente tranquilo la convierten en un lugar perfecto para relajarse y disfrutar del sol y el mar.

Además de la playa, Cala Morell es conocida por sus cuevas prehistóricas. Estas cuevas, que datan de la época talayótica, son un importante sitio arqueológico y ofrecen una visión fascinante de la historia antigua de Menorca. Los visitantes pueden explorar las cuevas y maravillarse con las pinturas rupestres y las estructuras talayóticas que se encuentran en su interior.

El entorno natural que rodea Cala Morell también es perfecto para los amantes del senderismo y el excursionismo. Hay senderos que serpentean por los acantilados y ofrecen vistas panorámicas del mar Mediterráneo, proporcionando una experiencia única para aquellos que deseen explorar la belleza natural de la zona.

Cala Morell | Foto de Enfo, CC BY 3.0, via Wikimedia Commons

Para comer

Hasta ahora solo hemos hablado de restaurantes que ofrecen comida mediterránea, pero ¿por qué no comer en un buen asiático? Enricana es un local ubicado a escasísima distancia y ofrece platos típicos de Japón a un precio más que aceptable.

Por la tarde

Tras quedar maravillado con la Cala Morell, adéntrate en otra que también es maravillosa: Cala en Bosc. La cala cuenta con una amplia playa de arena fina y aguas tranquilas, lo que la convierte en un lugar ideal para relajarse y disfrutar del sol. Sus aguas claras y poco profundas son perfectas para nadar y practicar actividades acuáticas como el snorkel y el buceo, ya que permiten apreciar la vida marina y los arrecifes de coral cercanos.

Además de la playa, Cala en Bosc cuenta con un puerto deportivo que alberga numerosas embarcaciones y ofrece la posibilidad de practicar deportes acuáticos y realizar excursiones en barco. También hay una gran variedad de actividades de ocio, como parques acuáticos y centros de entretenimiento para niños, lo que lo convierte en un destino popular para familias.

Cala en Bosc ofrece una animada vida nocturna con bares y discotecas que brindan entretenimiento hasta altas horas de la noche. Es un lugar ideal para aquellos que desean combinar días de sol y playa con noches de diversión y entretenimiento.

Cala en Bosc | Foto de Gerriet, CC BY 2.0, via Wikimedia Commons

Por la noche

Lo último que harás en Menorca es visitar Sant Joan, un pequeño pueblo. El centro del pueblo de Sant Joan se caracteriza por sus calles estrechas y empedradas, casas encaladas y una encantadora plaza donde los habitantes suelen reunirse. Aquí se puede experimentar la vida cotidiana menorquina y disfrutar de la hospitalidad de los habitantes del pueblo.

Uno de los puntos destacados de Sant Joan es su ermita, conocida como Ermita de Sant Joan de Missa. Esta hermosa iglesia de estilo gótico se encuentra en lo alto de una colina, ofreciendo unas vistas impresionantes del paisaje circundante. La ermita es un lugar de peregrinación y también es apreciada por su valor histórico y arquitectónico.

La Ermita de Sant Joan de Missa cuenta con una fachada de piedra y una sencilla pero encantadora decoración interior. Es un lugar tranquilo y sereno, perfecto para aquellos que buscan momentos de reflexión y paz. La iglesia también alberga una pequeña tienda de recuerdos donde se pueden adquirir objetos religiosos y recuerdos de la visita.

Para cenar

No hay mejor manera de despedirse de Menorca que con una apetitosa cena. Hay varios restaurantes a no mucha distancia que te recomendamos desde TipsViajeros. Dos de ellos son conocidos como Es Caliu y Maribel.


Recomendaciones para comer en Menorca:

Puedes disfrutar de una amplia variedad de platos tradicionales típicos en Menorca, tales como:

  • Ensaimada: Es un dulce típico de Mallorca, que consiste en una masa dulce y esponjosa con forma de espiral y se espolvorea con azúcar glas. Se puede encontrar rellena de crema, cabello de ángel o nata.
  • Tumbet: Plato de verduras típico de Mallorca, que se elabora con berenjenas, patatas, pimientos y tomates, todo ello cortado en rodajas finas y frito en aceite de oliva.
  • Paella: Es un plato muy popular en toda España y también en Mallorca. Se elabora con arroz, mariscos, pollo, pimiento, azafrán y otras especias.
  • Sobrasada: Es un embutido típico de Mallorca, elaborado con carne de cerdo, pimentón y otras especias. Se suele servir untado sobre pan tostado.
  • Frito menorquín: Plato de carne y verduras frito en aceite de oliva, que suele llevar carne de cerdo, patatas, pimientos, cebolla y tomate.
  • Coca de trampó: Es una especie de pizza o empanada, elaborada con una masa fina y crujiente, que se cubre con una mezcla de tomate, pimiento y cebolla.

Si quieres que te recomendemos lugares para comer, estos son algunos de los restaurantes mejor valorados de la ciudad:

  • S’Amarador: Crustáceos, berberechos, pescados a la parrilla y guisos de pescado y mariscos en un establecimiento informal con terraza adyacente al puerto.
  • Es Tast de na Sílvia: Selección de platos para degustar, elaborados con ingredientes frescos y locales en un establecimiento sofisticado de paredes blancas.
  • Pinzell: Exquisitos platos tradicionales de la cocina regional y vinos en un elegante restaurante con terraza.

Cómo moverse por Menorca durante tu visita:

Menorca cuenta con una amplia variedad de opciones de transporte para moverse por la ciudad y sus alrededores. Estas son algunas de las más recomendables:

  • Alquiler de coche: Una forma cómoda y flexible de explorar la isla es alquilar un coche. Menorca cuenta con una buena red de carreteras y es relativamente fácil moverse de un lugar a otro en vehículo. Hay varias empresas de alquiler de coches disponibles en el aeropuerto y en diferentes puntos de la isla.
  • Autobús: Menorca pone a tu disposición un servicio de autobuses públicos que conecta diferentes localidades y playas de la isla. La empresa responsable del transporte público en Menorca se llama Transporte Regular de Menorca (TMSA). Los autobuses son una opción económica y te permiten desplazarte por la isla, aunque es importante tener en cuenta los horarios y la frecuencia de los servicios.
  • Taxis: Los taxis son otra opción para moverte por Menorca. Hay paradas de taxis en los principales pueblos y en el aeropuerto. Puedes solicitar un taxi por teléfono o en las paradas designadas. Ten en cuenta que los precios de los taxis son más altos en comparación con otras opciones de transporte.
  • Bicicleta: Menorca es una isla ideal para recorrer en bicicleta. Hay numerosas rutas y caminos que te permiten explorar sus hermosos paisajes y playas. Puedes alquilar bicicletas en diferentes puntos de la isla y disfrutar de un paseo más tranquilo y eco-friendly.
  • Barco: Si deseas desplazarte entre las diferentes playas y calas de Menorca, puedes optar por excursiones en barco. Hay servicios de transporte marítimo que conectan distintos puntos de la costa, ofreciendo una forma única de disfrutar del paisaje costero y acceder a calas de difícil acceso por tierra.

Mapa de Menorca con los principales puntos de interés para visitar y sitios donde comer:


Con esto terminamos nuestra propuesta de plan para recorrer la isla de Menorca en tan solo siete días. ¡Esperamos que disfrutes de la visita!

Actividades en Menorca

Leo Viajero
Leo Viajero

¡Hola, viajeros! Soy Leo, el escritor detrás de este blog de viajes. Desde que era niño, siempre he sentido una pasión inquebrantable por explorar el mundo y descubrir nuevos lugares, culturas y experiencias. Ahora, como adulto, sigo alimentando esa pasión viajando tanto como puedo, y me encanta compartir mis aventuras con todos ustedes a través de este blog.

Mi objetivo principal es crear contenido de viajes útil, auténtico y confiable que pueda ayudar a planificar su próximo viaje con confianza. En mis publicaciones, me aseguro de compartir información precisa y actualizada sobre destinos, actividades, alojamiento, transporte, presupuesto y más. También trato de ofrecer consejos prácticos y consejos basados en mi propia experiencia, para que puedas sacar el máximo provecho de tu tiempo y dinero mientras viajas.

Pero no solo se trata de datos y estadísticas. También me encanta compartir las historias detrás de mis viajes, las lecciones que he aprendido en el camino y las reflexiones personales que surgen cuando se viaja. Creo que los viajes pueden ser una fuente de crecimiento y transformación personal, y me gusta compartir esas ideas con mis lectores.

Finalmente, me enorgullece ofrecer un espacio seguro y inclusivo para todos los lectores, sin importar su origen, género, orientación sexual o cualquier otra característica. Creo que los viajes son una oportunidad para conectarnos con personas de todo el mundo y celebrar nuestra diversidad, y espero que mi blog refleje ese valor.

Gracias por leer y acompañarme en este viaje. Espero que encuentres inspiración, información útil y un sentido de comunidad en este blog de viajes. ¡Nos vemos en la carretera!

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