Cuando pensamos en la época navideña, si queda mucho, la recordamos con nostalgia, y la esperamos con expectación. Pero no siempre tiene por qué ser así, porque luego al final suele ser una época de peleas, aunque también de reconciliaciones. Da lo mismo, pues de lo que hoy vamos a hablar, es de viajar a Nueva Zelanda. Pero no en una época concreta, sino en la Navidad. Porque tiene que ser curioso, y divertido, pasar unas navidades diferentes, lejos de lo típico… bueno, si es que realmente son tan diferentes a las nuestras. Porque de eso se trata lo de hoy, de comparar la Navidad neozelandesa, con la nuestra.
Nueva Zelanda es uno de los países de Oceanía, junto con Australia, que tiene una tradición de lo más occidental. De hecho, son considerados como los países occidentales de esta parte del mundo, porque la colonización ha hecho que su población, sus costumbres, y sus culturas, sean de lo más parecidas a las del mundo que está situado más al Oeste. En cualquiera de los casos, ¿pasa también con la Navidad? Pues ahora vamos a verlo, así que si te interesa el tema, no dudes en seguir leyendo, porque esto promete ser interesante.
Al igual que en los países de Occidente, en Nueva Zelanda existe una mayoría cristiana. Bueno, aunque es una sociedad bastante laica, las raíces religiosas están ahí, y por eso debemos tenerlas en cuenta. Esto hace que se celebre el nacimiento del niño Jesús. Sin embargo, esta tradición se mezcla con las costumbres maoríes que ya había en la zona, dando lugar a algo nuevo y muy original. De hecho, allí Santa Claus no tiene elfos, sino que tiene espíritus maoríes que sirven como ayudantes de este hombre que reparte regalos por las casas.
En cuanto a las celebraciones, es cierto que también son familiares, pues se organizan cenas en familia, o con amigos íntimos. La cuestión es celebrarlo por todo lo alto con las personas que más te importan. Y en la mesa no pueden faltar determinados platos, como es el pavo relleno, así como los típicos caramelos de Navidad que tienen forma de bastón, y se les da a los niños que se han portado bien durante el año. Además, coincide con la temporada de verano, así que es común ver a familias enteras disfrutando de alguna de las maravillosas playas de la zona, ya que tienen garantizado el buen tiempo.
También es típico de ahí decorar el árbol de Navidad. Puede parecer un poco extraño, y de hecho te lo parecerá, la primera vez que estés ahí, con todo el calor que hace, y sin embargo ver a la gente colocar las luces, los árboles de Navidad siendo decorados, y las tiendas con aire acondicionado, mientras otros tantos deciden pasar la tarde buceando, surfeando, y haciendo todo tipo de deportes y de actividades que permitan enfrentarse a este calor. No tendrás, claro que no, unas navidades nevadas o blancas, pero sí que serán de lo más originales.
Claro está, al existir Papá Noel en su cultura, los niños son uno de los centros de atención, pues se les suele dar regalos, si se han portado bien, y podemos ver árboles enteros decorados con regalos. Pasar el tiempo con la familia, montando el árbol, eligiendo regalos, llegando a los centros comerciales y haciendo las compras navideñas, es toda una experiencia de la que debes disfrutar plenamente. Entonces, ¿estás dispuesto a ir a Nueva Zelanda durante la Navidad? no lo dudes y reserva tus billetes ya. No te arrepentirás.
