Al llegar al Paprica tendréis que hacer frente a una encrucijada: ¿dentro o fuera? Lo cierto es que el interior está decorado con mucho gusto, pero en el exterior también podréis gozar de una velada íntima, sobre todo si se trata de una cena. Y es que en horario nocturno se encienden unos farolillos que, actuando a modo de velas, proporcionan una cálida luz indirecta que gusta mucho a los enamorados.

El hecho de que Paprica esté considerado hoy en día como uno de los mejores restaurantes románticos de Lugo viene dado no solo por disponer de estos dos espacios tan diferenciados entre sí, sino también por el buen hacer de todo su equipo, especialmente del chef que es muy reconocido en toda Galicia. Se trata de Álvaro Villasante.

Tanto dicho chef como todos los demás que forman parte del Grupo Nove Cociñeiros tienen un claro objetivo: innovar al preparar varios platos típicos de Galicia sin que ello suponga renunciar a la tradición. Así pues, los comensales son sorprendidos con nuevas técnicas culinarias pero, a pesar de ello, siguen teniendo la sensación de comer los platos que históricamente siempre se han degustado en Galicia.