El restaurante Moss se autodefine como un Lounge Club. En sus instalaciones podréis disfrutar comiendo, cenando o simplemente tomando unas copas, gozando al mismo tiempo de un ambiente que os encantará por ser agradable y acogedor.

Solo cierra los lunes, pero el resto de la semana permanece muchas horas abierto, sin ninguna interrupción. Sea cual sea el momento del día o de la noche que elijáis para ir al Moss, os sorprenderá la cantidad de clientes que hacen acto de presencia en este local. Ello es debido a lo a gusto que se está en él.

Tanto las parejas como los demás comensales se sienten bien en unas instalaciones cálidas con madera en el suelo y ladrillo en algunas de las paredes. Otro de los comedores tiene un color azul cielo que aporta una impagable sensación de relajación y bienestar.

Lo que más sorprende del Moss es lo bien que están fusionadas varias gastronomías completamente distintas entre sí: peruana, mexicana, japonesa y mediterránea. ¿El resultado? Unos platos que sorprenden muchísimo por su sabor original, así como por unas texturas que no os dejarán indiferentes. Tampoco pasa desapercibida la presentación de los platos que es bastante bonita.