


Llevar a buen puerto un proyecto con una antigüedad de hace más de ocho décadas no es nada sencillo, pero los responsables de La Bombi lo consiguen con una serie de aspectos muy positivos que valoran las parejas que se decantan por dicho restaurante romántico de Santander. El primero de ellos hace referencia al trato. Destaca por ser cercano, agradable y profesional, realizando alguna que otra recomendación o sugerencia en caso de que sea preciso.
Por supuesto, solo con un buen trato no se consigue la excelente fama que tiene La Bombi en la capital cántabra. También se requiere ofrecer a los comensales platos de buena calidad cuyo precio esté bien ajustado. Es precisamente otra de las características de este restaurante. A pesar de hacer uso de materias primas sobresalientes en todos los sentidos, ello no se traduce en una carta cara o un menú prohibitivo. Así pues, estamos ante una muy buena relación calidad precio.
La Bombi está perfectamente ubicado en las proximidades del puerto. Además, la comodidad se hace patente en todo momento para permitir a todas las parejas disfrutar al máximo de platos tan recomendables como las croquetas de gambas y el atún rojo de almadraba.