Sitges cuenta con una iglesia que es bastante popular a nivel nacional, la cual está delimitada por una especie de muralla. Justo al lado de ella se encuentra el Fragata, por lo que hablamos de un local muy bien ubicado. De hecho, al estar en primera línea proporciona a los comensales unas buenas vistas desde el comedor exterior.

Hablando del salón interior, es palpable lo bien que le sentó la remodelación que tuvo lugar en el año 2005. Lo cierto es que las instalaciones lo necesitaban, puesto que fueron abiertas en 1965. Los cambios llevados a cabo dieron forma al Fragata que conocemos hoy en día, el cual destaca por ser moderno, cálido y acogedor a partes iguales.

Uno de los aspectos más destacables del local en lo referente al interiorismo guarda relación con la disposición de sofás. Es algo que valoran muy positivamente las parejas, puesto que tienen la posibilidad de comer sentándose en sillas con reposabrazos o gozando si cabe de una mayor comodidad en un sofá.

Los responsables del Fragata seleccionan cuidadosamente cada materia prima para ofrecer una buena calidad a la hora de elaborar platos típicos tanto de Catalunya como del Mediterráneo en general.