Este restaurante es el lugar ideal para hacer un buen tapeo en el centro del barrio de la judería, justo al lado de la Mezquita. Junto con un buen vino, unas bravas y una buena compañía, podrás disfrutar de las mejores tapas en un ambiente agradable y acogedor. La carta es variada y ofrece la opción de compartir… o no. Embutido, tostas o bocatines, platos tradicionales… ¡Tú eliges! Por cierto, no te olvides de probar los postres, ¡son de otro mundo!