10 restaurantes románticos en la Costa Brava

Considerado por muchas parejas el restaurante más romántico de toda la Costa Brava, el Bo.TiC da la bienvenida en el municipio de Corçà tanto a los enamorados como al resto de comensales recibiéndoles con un distintivo que ya les hace saber la calidad que se encontrarán en el local. Nos referimos a dos estrellas Michelin.

El principal objetivo tanto del chef Albert Sastregener como del resto de profesionales que trabajan en el Bo.TiC es claro: emocionar a cada comensal por medio de sus creaciones. Hablando de ellas, es destacable que mantienen la base y la esencia de los platos típicos catalanes, aunque ello no les impide plantear nuevas propuestas con tal de que los clientes prueben sabores nunca antes disfrutados en sus paladares.

Para ello ofrecen un par de menús, por lo que todas las parejas se ven capaces de elegir aquel que más se ajuste a sus necesidades, preferencias y deseos gastronómicos.

El menú de degustación es más económico, abarcando platos como el cordero de raza ripollesa cocido a baja temperatura y el guisado de guisantes con aire de agua de erizo de mar. Por su parte, el menú del Chef brinda la posibilidad de deleitarse con elaboraciones de autor como el fósil de ostra y el tártaro de vaca vieja madurada a lo largo de 45 días.

Bo.TiC ya empezó a registrar una gran actividad en el año 2007 justo cuando se abrió. Actualmente su nivel de popularidad es mayor que antes, por lo que se recomienda llamar con tal de hacer una reserva.

En las instalaciones conocidas como Miramar no solo hay un restaurante, sino que también ofrecen habitaciones para disfrutar al máximo de una zona tan bonita como Llançà. Hablando del local de restauración en sí, aquello que le lleva a destacar se resume en unas vistas asombrosas que vienen dadas por lo privilegiado que es el emplazamiento en el que se encuentra.

El hecho de estar a pie de playa permite apreciar todos los matices del agua de la Costa Brava, incluyendo las tonalidades turquesas que se muestran durante gran parte del día. Por supuesto, en plena noche también son más que disfrutables las vistas, generándose un ambiente romántico en todos los sentidos.

Por otra parte, un aspecto diferenciador del Miramar es el de no requerir estar en una terraza exterior para gozar de las vistas, ya que son contemplables desde el comedor interior.

Precisamente ahora que hemos mencionado el interior llega el momento de profundizar en él, hablando de unas instalaciones que son modernas, acogedoras y muy cómodas. Así lo demuestra la confortabilidad que aportan los cojines de las sillas de mimbre.

En lo referente al aspecto puramente gastronómico, el restaurante Miramar ofrece platos vanguardistas en un local que ha sido premiado con dos estrellas Michelin. Así pues, las parejas disfrutan de una calidad difícil de superar, especialmente al decantarse por el menú degustación en el que se mezclan infinidad de sabores, lo cual traslada a los comensales multitud de sensaciones.

Lo primero que notaréis al acceder a este restaurante romántico de la Costa Brava es la gran calidez que llega a transmitir, lo cual es fruto de haber dado en el clavo a la hora de elegir la decoración del local. La atmósfera de romanticismo en estado puro es idónea para que viváis una velada íntima en plena Girona.

En el techo hay varios puntos de luz tanto en forma de plafones como a modo de lámparas colgantes, estando destinadas estas últimas a iluminar las pinturas colgadas en las paredes. Los óleos os impresionarán sobre todo si sois amantes del arte, aunque incluso si es una temática que no os apasiona no podréis evitar admirarlos por la belleza que desprenden.

En el restaurante Massana siempre disponen de productos de temporada, los cuales hacen gala de una gran calidad. Solo de esta manera se aseguran de ser capaces de poner en práctica las mejores técnicas basadas en la alta cocina de Catalunya para obtener resultados inmejorables.

Aunque la tradición tanto de la cocina catalana como de los ingredientes en sí es respetada al máximo, la creatividad es sacada a relucir para dar forma a platos que sorprenden, sirviéndolos con una presentación delicada y atractiva a partes iguales.

Gracias a lo bien ubicado que está el restaurante Massana, un buen plan para hacer en pareja consiste en visitar la ciudad de Girona, la cual es conocida en todo el país por ser muy romántica. Esta actividad la disfrutarás al máximo en pareja sobre todo si sabes exactamente qué ver en Girona capital y alrededores.

En ocasiones a los restaurantes les resulta difícil combinar vanguardismo con tradicionalidad. Sin embargo, en este local ubicado en Llagostera llevan años consiguiéndolo, obteniendo muy buenos resultados que entusiasman a las parejas que acuden a este restaurante romántico de la Costa Brava.

Los platos de cocina tradicional de Catalunya son disfrutados al máximo gracias al buen sabor que proporcionan los productos. Concretamente son alimentos de temporada que se basan en una tendencia cada vez más extendida entre los restaurantes: la del kilómetro cero. De hecho, tanto el pan como los postres, incluyendo los pasteles, son elaborados por los propios cocineros de Els Tinars.

El menú de temporada presume de una buena relación calidad-precio, así como los platos que forman parte de la carta. En los dos casos, sean cuales sean las elaboraciones gastronómicas que pidáis se os servirán con una presentación exquisita, gozando al mismo tiempo de la comodidad que proporciona el local.

Por dentro las instalaciones llaman la atención por lo espaciosas que son, una característica que valoran muy positivamente las parejas. La sensación de amplitud también viene dada por la gran altura a la que se encuentra el techo en la parte central del comedor interior.

En el Baix Empordà hay un pequeño pueblo bastante desconocido que tiene mucho encanto. Se trata de Regencós. A pesar de abarcar una superficie de solamente seis kilómetros cuadrados, cuenta con varios atractivos entre los que se encuentra uno de los mejores restaurantes románticos de la Costa Brava. Nos referimos a El Teatre.

Si queréis gozar de una velada romántica que nunca olvidaréis lo más recomendable es acudir a este local en plena noche, aunque las comidas también son íntimas y se disfrutan al máximo. Y es que en ambos casos son servidos platos que mantienen la esencia de las recetas típicas del Empordà, preservando sus raíces pero planteando una serie de proposiciones de carácter más bien sutil para ofrecer nuevas experiencias a los comensales.

La piedra de las paredes contrasta con la oscuridad tanto del techo como del suelo e incluso de las sillas. Gracias a los diversos puntos de luz que cuelgan de la parte superior y que parecen lámparas de mimbre se da forma a una de las atmósferas más acogedoras de todos los locales de restauración ubicados en la Costa Brava.

Atreverse a innovar es un reto para la mayoría de restaurantes, pero en el Divinum hacen los esfuerzos oportunos con tal de obtener muy buenos resultados a la hora de poner en práctica técnicas creativas de cocina, por supuesto respetando la tradicionalidad de los ingredientes. La cocina catalana y española se disfrutan plenamente, sobre todo los quesos que se elaboran de manera artesanal.

Ahora que hemos hablado de uno de los platos que más suelen pedir las parejas que acuden al Divinum es un buen momento para hablar de la carta. Amplitud, variedad y originalidad: estas tres características están muy presentes en ella, demostrándolo a la perfección elaboraciones como el steak tartar de ternera de Girona y el bogavante con parmentier.

En el Divinum también hay disponibles varios menús. Uno de los más recomendables es el conocido como Esencia, incluyéndose en él platos como los siguientes: cacahuete de foie a la brasa, espardenyes con angulas vegetales y mediana baja de ternera reposada con aceitunas.

En el año 2016 se habilitó parcialmente una masía a modo de restaurante. La estructura a la que se dio forma en 1352 hace gala de un estado óptimo, impresionando tanto por fuera como por dentro.

Varios aspectos llaman la atención del local, desde la altura del techo y las vigas de madera presentes en él hasta las paredes de piedra, tratándose de un espacio que suele gustar muchísimo a las parejas. Dicho factor también viene dado por su privilegiado emplazamiento, rodeado de vegetación.

Este restaurante se encuentra en Pals, uno de los pueblos con encanto más bonitos de Girona. Es por ello que tantas parejas aprovechan para recorrerlo tras degustar los deliciosos platos del Pahissa del Mas que se elaboran con productos frescos y de temporada. Jordi Vallespi es el encargado de elaborarlos, recomendando fervientemente el menú degustación que entusiasma a los enamorados.

Muchas parejas, al elegir un restaurante romántico, se fijan en las vistas. Si también es vuestro caso no dudaréis en optar por Sa Marinada, uno de los mejores locales en este sentido, ya que desde el interior de las instalaciones disfrutaréis de una skyline impresionante del puerto de Sant Feliu de Guíxols.

Todo tipo de embarcaciones están amarradas en el lugar, deleitándoos con ellas y con el agua del puerto en sí. Los enormes ventanales verticales dan pie a que la luz del sol incida en el interior, por lo que es un local muy bien iluminado de manera natural. Por supuesto, por la noche también se disfruta de la comida que sirven en la marisquería.

Independientemente de si optáis por comer o cenar, el romanticismo se apoderará de la velada al mismo tiempo en que vuestros paladares disfrutan de platos como la langosta del Mediterráneo a la catalana, los canelones de marisco y el suquet que tan típico es en la zona del Empordà.

En el romántico pueblo de Pals está ubicado el restaurante Sol Blanc, galardonado con un Sol de la Guía Repsol. Ello no sorprende teniendo en cuenta la buena calidad que tienen todos los platos que son servidos con una cuidada presentación en un local cómodo, acogedor y espacioso.

Una lámpara de araña de cristal cuelga del techo ubicado a una gran altura, presidiendo el salón perfectamente iluminado y muy bien conservado, lo cual es meritorio teniendo en cuenta la antigüedad de la masía de la que forma parte el restaurante.

No es de extrañar que los arroces sean unos de los platos que más gustan a las parejas que eligen este local. Y es que el mismo está rodeado de varios arrozales, los cuales son bastante numerosos en la población de Pals.

De las diversas poblaciones que hay en la Costa Brava, una de las más románticas es Tossa de Mar. ¿Sabías que en esta zona acuática hay un restaurante que enamora a novios y matrimonios? Efectivamente, tratándose del Can Sophia, el cual se emplaza concretamente en el casco antiguo de dicha localidad.

Tanto el hierro forjado como el cristal combinan a la perfección, dando forma a un local cómodo a más no poder, tal como demuestran las sillas acolchadas que cuentan con reposabrazos, un detalle a tener en cuenta.

La carta del Can Sophia es bastante amplia, pudiendo decirse lo mismo de la bodega. Así pues, podréis acompañar a la perfección todos los platos de cocina contemporánea que elabora Vicente Batuecas, un reputado chef.