10 restaurantes románticos en Budapest

En pleno río Danubio, concretamente en un barco flotante que permanece inmóvil en su privilegiada ubicación, se encuentra uno de los restaurantes que mayor éxito cosechan entre las parejas de todas las edades. Nos referimos al Spoon, el cual ofrece una experiencia inolvidable no solo a los enamorados, sino también al resto de clientes.

Todos ellos disfrutan de una comida o cena que es memorable de principio a fin, empezando por el buen trato del personal que forma parte del equipo del Spoon. Tras la acogedora bienvenida, llega el momento de empezar a gozar de una experiencia muy completa, tal como demuestra la música en vivo que ameniza la velada romántica.

Las vistas a Buda son espectaculares. De hecho, no podréis evitar sacar fotografías cada dos por tres con tal de inmortalizar un escenario que no os dejará indiferentes. Incluso de noche gozaréis de un espectáculo visual, ya que uno de los monumentos más icónicos de Budapest se ilumina para deleitar a los viajeros.

En lo que respecta a la gastronomía, hay varios platos muy recomendables para los novios y matrimonios. Uno de ellos es el goulash, una especie de estofado que elaboran con maestría en el Spoon. Además, este restaurante romántico de Budapest ofrece una amplia selección de vinos.

En pleno lago del City Park, parque del que hablamos en nuestro artículo sobre qué ver en Budapest con niños, se encuentra emplazado el Robinson. Así pues, hablamos de una ubicación inmejorable. Precisamente fue el privilegiado lugar en el que se encuentra aquello que le llevó a experimentar un gran crecimiento desde su inauguración en el año 1989.

Las instalaciones, por otra parte, están muy bien acondicionadas. Durante la estación invernal, ochenta comensales -entre los cuales hay numerosas parejas- pueden gozar de una experiencia insuperable. La cifra aumenta hasta los cien en total durante el verano, ya que la superficie disponible se amplía con una terraza en la que da gusto estar.

Tanto dentro como fuera, las vistas al lago son muy románticas. Pero el factor visual no es lo único que destaca del Robinson. Es habitual dar con restaurantes que ofrecen buenas vistas pero, a cambio, dejan que desear en lo que respecta a la gastronomía. No es el caso de este restaurante de Budapest.

El Robinson pone a disposición de los comensales una extensa carta de la que forman parte, entre otros platos, varias carnes a la parrilla. Las que probamos nosotros estaban deliciosas. Eso sí, hay que decir que las raciones tal vez se les queden un poco cortas a aquellas parejas que son de comer abundantemente.

Cuando hablamos sobre qué ver en Budapest, trajimos a colación un monumento: el Parlamento. ¿Sabías que puede observarse desde un restaurante muy romántico de la ciudad? En efecto, el cual es conocido bajo el nombre de Aranybástya.

Al estar en un lugar de Buda bastante elevado, ofrece unas vistas privilegiadas no solo del citado monumento, sino también de otras espectaculares zonas de la ciudad. Además, mientras las contempláis, escucharéis de fondo una música que es perfecta para amenizar las veladas íntimas.

La atención que se recibe durante la experiencia gastronómica es excelente en todos los sentidos. El personal hace todo lo posible con tal de que cada comensal quede cien por cien satisfecho. Lo cierto es que lo consigue, en gran medida por sus buenas recomendaciones y sugerencias.

En nuestro caso, nos insistieron en que, en base a los gustos que les comunicamos, no podíamos perdernos dos recetas en concreto: las carrilleras guisadas en vino tinto, amén de la tarta de queso con manzana y caramelo. La elección fue la mejor posible. Eso sí, hay que decir que los precios no son aptos para todos los bolsillos.

En el río Danubio hay varios restaurantes que forman parte de embarcaciones flotantes. Algunos de ellos pecan de tener una relación calidad-precio no demasiado buena, ya que aprovechando las vistas tan atractivas que brindan, ofrecen platos que no están a la altura en términos de sabores, raciones u otros aspectos. No es el caso que nos ocupa.

Y es que el BOATanic Terrace & Bar es excelente a todos los niveles. No importa si queréis disfrutar de unos cócteles y/o aperitivos mientras gozáis de unas vistas asombrosas o pretendéis comer platos más elaborados. En cualquier caso, quedaréis encantados con la experiencia que os proporcionará dicho restaurante.

El BOATanic Terrace & Bar es tan romántico que incluso se celebran bodas en sus cómodas, amplias y acogedoras instalaciones. Y no es para menos, puesto que su ubicación, decoración y ambiente atraen a numerosas parejas tanto de Hungría como del resto del mundo.

La música no molesta lo más mínimo. Todo lo contrario: es ideal a modo de amenización. No tiene precio ver el atardecer desde este privilegiado emplazamiento al mismo tiempo en que escucháis las melodías que van sonando de fondo.

Hay que empezar diciendo que el Halászbástya Étterem tiene unos precios que no todas las parejas pueden permitirse. Sin embargo, esto no significa que sea un restaurante caro. Lo cierto es que la relación calidad-precio es excelente. ¿Cómo es posible si acabamos de decir que el importe a abonar por los platos es muy elevado? Básicamente porque también lo es la calidad de las elaboraciones gastronómicas.

Su calidad es tan alta que ir a comer o cenar sin reserva es prácticamente misión imposible. Ello es debido a que los paladares más refinados no se lo piensan dos veces a la hora de decantarse por el Halászbástya Étterem, sabiendo que su alto nivel de exigencia será satisfecho.

Aunque el Halászbástya Étterem no cuenta con una Estrella Michelin, podría ser merecedora del citado reconocimiento por los deliciosos sabores, las aromas, las texturas… ¡y la presentación de los platos! Será realmente difícil que evitéis la tentación de fotografiar los que os sirvan antes de hincarles el diente.

Al estar en pleno castillo, ofrece unas vistas espectaculares al río. Si a este aspecto sumamos lo bonito que es el local por dentro, no sorprende que tantísimas parejas elijan dichas instalaciones para celebrar una velada romántica e íntima a partes iguales, como por ejemplo un aniversario de boda.

En el Hotel Hilton de 5 estrellas -uno de los mejor valorados de Budapest-, concretamente en su planta baja, se encuentra un restaurante romántico que permite no solo comer y cenar con el amor de tu vida, sino también desayunar. Se trata del LÁNG Bistro & Grill.

Las instalaciones son ideales para gozar de una velada romántica. No solo son espaciosas y luminosas. Por si fuera poco, destacan por estar muy bien decoradas y por ofrecer un altísimo nivel de comodidad, gracias sobre todo a las butacas con reposabrazos, además de los sofás.

No es lo único que merece una mención especial. A la lista hay que sumar el personal. Todos los profesionales que forman parte del equipo de LÁNG Bistro & Grill atienden con amabilidad a los diversos comensales que acuden al local atraídos por su buena fama.

En cierta medida, esta popularidad también le viene dada por la ubicación de la que presume. A través de las ventanas se pueden admirar unas vistas que nunca olvidaréis. Además, tendréis muy cerca varios monumentos emblemáticos que podréis visitar prácticamente sin desplazaros.

El Babel se inauguró en 2008. Once años después, recibió un galardón del que presume hoy en día para demostrar a los comensales la buena calidad gastronómica que es capaz de ofrecer. Nos referimos a una Estrella Michelin. Es de los pocos restaurantes románticos de Budapest premiados con este reconocimiento.

No sorprende la alta calidad de sus elaboraciones. Y es que obviando la amplia experiencia de los chefs, el Babel llama poderosamente la atención por contar con una cocina de grandes dimensiones que está muy bien equipada. Así pues, los expertos en la materia siempre disponen de lo necesario para dar forma a platos sorprendentes.

En términos decorativos, todo está cuidado hasta el más mínimo detalle. Incluso la vajilla destaca por su diseño, lo cual no sorprende si tenemos en cuenta que fue diseñada por Ksenia Wallenstein, una eminencia del sector de la cerámica. Lo mismo hay que decir de la cristalería como las copas, las cuales están expuestas en las estanterías para hacer gala de la exclusividad que destilan.

Ahora que hemos hablado de las copas, es un buen momento para sacar a colación el maridaje. Es una experiencia insuperable si os entusiasman las bebidas alcohólicas, ya que junto a los deliciosos platos degustaréis tanto vinos blancos de Hungría como espumosos que satisfarán vuestros exigentes paladares.

¿Sois amantes de las buenas vistas? Si habéis respondido afirmativamente a esta pregunta, no os lo penséis dos veces y reservad mesa en el Leo Rooftop. Desde dichas instalaciones cuya ubicación es insuperable gozaréis de una skyline acuática de lo más bella, puesto que a vuestros pies estará el río Danubio. No es lo único que veréis, sumándose al listado el Puente de las Cadenas.

En concreto, Leo Rooftop se encuentra en Buda, por lo que las vistas que ofrece son a Pest. Si elegís el momento del día idóneo para tal fin, disfrutaréis de un atardecer único que os invitará a fundiros en un beso inolvidable.

Debido a lo bien ubicado que está, el Leo Rooftop no es precisamente un restaurante barato. ¿Merece la pena pagar los precios tan altos de los platos? Sin lugar a duda. Las parejas que pueden permitírselo salen encantadas de este local tan romántico.

La carta es variada a más no poder, por lo que sean cuales sean vuestros gustos, daréis con varias alternativas ideales para vuestros paladares refinados, exigentes y sofisticados: desde un poke que es perfecto a modo de entrante hasta un delicioso brownie con el que culminará la velada romántica.

En el New York Palace, un prestigioso hotel de la cadena Anantara, se encuentra un restaurante al que suelen acudir parejas. Esto es debido a que el local es perfecto para que tenga lugar en él una velada íntima.

Bajo nuestro punto de vista, no hay ningún otro restaurante en Budapest que tenga una decoración tan bonita como la del White Salon. Se basa en el estilo clásico, el cual acostumbra a gustar a la mayoría de enamorados.

En lo referente al factor gastronómico, en el White Salon han decidido innovar sin que ello suponga renunciar a los sabores clásicos de los platos típicos de Hungría. Aunque se mantienen, los chefs son capaces de plantear nuevas texturas, así como presentaciones que están adaptadas a los tiempos actuales.

Uno de los motivos por los que tantos viajeros deciden visitar Budapest se resume en la presencia del río Danubio y de varios monumentos emblemáticos como el Castillo de Buda. ¿Sabías que hay restaurantes que ofrecen vistas a ambos elementos? Efectivamente, siendo un claro ejemplo el conocido como Corso.

Aunque las vistas son su principal aliciente, este restaurante romántico va más allá destacando por otros aspectos positivos como su decoración, la cual es sinónima de elegancia en estado puro. A su vez, el personal es hospitalario, logrando que todas las parejas se sientan acogidas desde el minuto uno en las instalaciones cómodas, espaciosas y bien decoradas.

Los ingredientes de los que hacen uso los chefs del Corso son frescos, con lo positivo que ello conlleva. Además, son de temporada, elaborando así unos platos que presumen de un alto nivel de calidad. A pesar de lo innovadoras que resultan algunas recetas, los sabores tradicionales son preservados gracias al buen hacer de unos cocineros muy experimentados.