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Auvernia-Ródano-Alpes es una región francesa con mucho encanto gracias a ciudades como Lyon. De hecho, está considerada como una de las 8 ciudades más bonitas de Francia. Cuenta con una superficie de 48 kilómetros cuadrados y es posible visitarla en poco tiempo. Eso sí, para ello necesitas una buena planificación como la que verás a continuación. Si te sobra tiempo, no dudes en visitar los puntos atractivos que están ubicados en los alrededores de Lyon y que también describiremos.
El primer lugar imprescindible es la Basílica de Notre-Dame de Fourvière. En su momento ya la describimos en el artículo de qué ver en Lyon en 1 día. Majestuosamente ubicada en la colina Fourvière, es uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad y un testimonio arquitectónico de la devoción religiosa y la riqueza cultural de la región. Esta imponente iglesia fue construida entre 1872 y 1884 en un estilo romano-bizantino, diseñada por el arquitecto Pierre Bossan, y se erige como un símbolo distintivo del horizonte de Lyon.
La basílica, también conocida como «La Colina que Reza», está en el lugar donde, según la tradición, los habitantes de Lyon rezaron a la Virgen María durante la invasión de los bárbaros en 1870. La construcción de la iglesia fue financiada en su totalidad por donaciones públicas y privadas, destacando el profundo significado religioso que tiene para la comunidad.
Al explorar el interior de la Basílica de Fourvière, los visitantes quedan impresionados por la belleza de su decoración, que incluye mosaicos deslumbrantes, vitrales y una serie de estatuas que rinden homenaje a figuras religiosas importantes. El altar mayor y la cripta subterránea agregan capas de solemnidad al lugar, creando un ambiente que invita a la reflexión espiritual.
Además de su importancia religiosa, la Basílica de Notre-Dame de Fourvière ofrece impresionantes vistas panorámicas de Lyon desde su terraza, convirtiéndose en un punto de referencia no solo para los fieles, sino también para los viajeros que buscan apreciar la belleza de la ciudad desde las alturas. Si también es tu caso, no dudes en apuntarte a este free tour:
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La lista de lugares va más allá con otra recomendación: la Place Bellecour. Estamos ante una de las plazas más grandes de Europa, la cual ocupa un lugar central en la ciudad de Lyon y desempeña un papel trascendental en la vida cotidiana y la historia de la región. Situada en la confluencia de los ríos Ródano y Saona, esta amplia plaza se extiende majestuosamente en el corazón de la ciudad, sirviendo como punto de encuentro, espacio público y escenario para eventos significativos. De hecho, es uno de los puntos que forman parte de esta visita guiada:
Rodeada por edificios impresionantes, la Place Bellecour alberga una estatua ecuestre de Luis XIV, que preside la plaza con su imponente presencia. Esta estatua, erigida en el siglo XIX, se convierte en un recordatorio de la historia monárquica de Francia.
El espacio abierto de la plaza brinda a los habitantes y visitantes un lugar para relajarse, pasear y disfrutar de la animada atmósfera que caracteriza a Lyon. Los cafés y tiendas que bordean la plaza añaden un toque contemporáneo a este espacio histórico, fusionando la modernidad con la tradición de manera armoniosa.
Si estás en Lyon, otro lugar que bajo ningún concepto te puedes perder es el Parque de la Tête d’Or, por el cual pasa el siguiente tour que se lleva a cabo en bicicleta:
Se trata de un tesoro natural que cautiva a lugareños y viajeros por igual. Este vasto parque, que abarca más de 100 hectáreas, se erige como uno de los espacios verdes urbanos más grandes de Francia y ofrece un refugio del bullicio de la ciudad. Su nombre, que se traduce como «Parque de la Cabeza de Oro», se refiere a la leyenda de un tesoro enterrado que se dice que yace en sus tierras, añadiendo un toque de misterio a su encanto.
Inaugurado en 1857, el Parque de la Tête d’Or es un testimonio del diseño paisajístico del siglo XIX, con senderos serpenteantes, lagos pintorescos y una variedad de espacios temáticos. El Jardín Botánico, parte integral del parque, alberga una impresionante colección de plantas y flores, proporcionando a los amantes de la naturaleza un escape botánico fascinante.
El lago central, donde los visitantes pueden disfrutar de paseos en bote durante los meses más cálidos, añade un toque de serenidad al paisaje. Además, la presencia de ciervos y otras especies animales en un área acotada del parque crea un ambiente único, acercando a los visitantes a la naturaleza en medio de la vida urbana.
El Parque de la Tête d’Or también alberga diversas instalaciones recreativas, desde áreas de juegos para niños hasta pistas de tenis y campos de deportes, lo que lo convierte en un lugar ideal para el esparcimiento y la actividad física. Además, el Jardín de las Rosas, con sus coloridos parterres florales, añade un toque romántico al parque, ofreciendo un escenario encantador para pasear o simplemente relajarse.
En las proximidades de Lyon se emplaza un atractivo turístico imprescindible: el Acueducto del Gier. Este impresionante vestigio de la ingeniería romana se erige como un testimonio tangible de la capacidad técnica y la visión urbanística de la antigua Roma en la región de Lyon. Construido durante el siglo I d.C., este acueducto fue una de las numerosas obras maestras que marcó la expansión de la red de abastecimiento de agua de la ciudad de Lugdunum, la actual Lyon. Su nombre proviene del río Gier, que suministraba agua a través de este intrincado sistema de canales elevados y subterráneos.
A lo largo de sus aproximadamente 85 kilómetros de extensión, el acueducto utilizaba arquerías para elevarse sobre valles y terrenos irregulares, mostrando un dominio excepcional de la topografía. Además, su ingeniosa construcción subterránea permitía la preservación del agua y minimizaba la evaporación durante los largos trayectos.
La funcionalidad del Acueducto del Gier iba más allá de la mera provisión de agua potable; también facilitaba el riego de campos agrícolas a lo largo de su ruta, contribuyendo así al desarrollo económico de la región. Su compleja red de distribución permitía llevar agua a fuentes públicas y privadas, abasteciendo a la creciente ciudad romana y mejorando la calidad de vida de sus habitantes.
A lo largo de los siglos, el Acueducto del Gier ha resistido la prueba del tiempo, y partes de su estructura aún se conservan hoy en día. Los arcos y pilares que se elevan majestuosamente sobre el paisaje son testigos silenciosos de una época pasada, evocando la grandeza de la civilización romana. Además de su importancia histórica, el acueducto también ha sido reconocido como parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO, subrayando su significado cultural y arquitectónico.
Por último, nuevamente cerca de Lyon, está ubicado el Musée de l’automobile Henri Malartre. En concreto, se emplaza en Rochetaillée-sur-Saône. Es una joya para los entusiastas del automovilismo y una ventana fascinante hacia la evolución de la industria automotriz a lo largo del tiempo. Fundado en 1960 por Henri Malartre, un apasionado coleccionista de automóviles, este museo se ha convertido en un lugar emblemático que alberga una impresionante colección de vehículos históricos que abarcan desde los albores de la era automotriz hasta modelos más contemporáneos.
Al adentrarse en las salas del Musée de l’Automobile, los visitantes se encuentran rodeados de una amplia variedad de automóviles, desde los primeros coches de vapor hasta elegantes automóviles clásicos de la Belle Époque. Cada vehículo expuesto cuenta una historia única sobre la evolución del diseño, la ingeniería y la cultura automotriz a lo largo de los años.
La colección incluye modelos icónicos de marcas de renombre, así como rarezas y prototipos que ilustran la creatividad y la innovación en la industria automotriz. Además de los automóviles, el museo también alberga una variedad de objetos relacionados con el mundo del automovilismo, como carteles publicitarios, herramientas antiguas y accesorios que complementan la narrativa visual y contextualizan la exhibición.
Si prefieres realizar un tour guiado por la ciudad y no perderte nada de la historia y las curiosidades de los lugares emblemáticos, puedes hacer un free tour y un tour privado:
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Recomendaciones para comer en Lyon:
Puedes disfrutar de una amplia variedad de platos tradicionales típicos en Lyon, tales como:
- Quenelle de Brochet: Una especie de albóndiga de lucio o lucioperca, a menudo acompañada de una salsa de langosta o de Nantua.
- Cervelle de Canut: Estamos ante un tipo de queso de cabra mezclado con hierbas y ajo, servido como un dip o untado en pan.
- Andouillette: Se trata de una salchicha de tripa de cerdo con un sabor fuerte y distintivo.
- Salade Lyonnaise: Ensalada que incluye lechuga, bacon, croûtons y un huevo pochado, todo ello aderezado con una vinagreta a base de mostaza.
- Tablier de sapeur: Una especialidad local que consiste en tripa de ternera empanada y frita. Se sirve caliente y crujiente.
- Poulet au Vinaigre: Pollo cocido en una salsa agridulce a base de vinagre y vino blanco.
Si quieres que te recomendemos lugares para comer, estos son algunos de los restaurantes mejor valorados de la ciudad:
- La mère Brazier: No sorprende que este restaurante haya sido galardonado con tres Estrellas Michelin. No es un restaurante barato, pero merece la pena el esfuerzo con tal de saborear la alta cocina lionesa. Se trata de uno de los 10 restaurantes románticos en Lyon.
- Milonga: Estar en Lyon no tiene por qué significar comer platos típicamente franceses. En el Milonga podrás degustar elaboraciones gastronómicas de Argentina.
- Miraflores: Lyon es una ciudad bastante influenciada por la gastronomía latinoamericana, tal como demuestra este restaurante que combina la cultura culinaria de Perú con la de Francia.
Cómo moverse por Lyon durante tu visita:
Lyon cuenta con una amplia variedad de opciones de transporte para moverse por la ciudad y sus alrededores. Estas son algunas de las más recomendables:
- Metro: Esta ciudad cuenta con un sistema de metro eficiente que consta de cuatro líneas. Es una forma rápida de moverse por Lyon, especialmente para distancias más largas.
- Autobús: La red de autobuses en Lyon es extensa y cubre áreas que no abarca el metro.
- Tranvía: Lyon tiene varias líneas de tranvía que conectan diferentes partes de la ciudad. Es una opción cómoda para desplazarse y disfrutar del paisaje urbano.
- Vélo’v (Bicicletas públicas): La ciudad dispone de un sistema de bicicletas públicas llamado Vélo’v. Puedes alquilar una bicicleta en una estación y devolverla en otra para un viaje corto y ecológico.
- A pie: Lyon es una ciudad muy caminable, especialmente el centro histórico. Muchos de los lugares de interés turístico están a una distancia no muy grande, y explorar a pie te permite descubrir encantadoras calles y plazas.
- Taxis y servicios de transporte compartido: Puedes utilizar servicios de taxi tradicionales o aplicaciones de transporte compartido para mayor comodidad, flexibilidad y privacidad, especialmente si tienes horarios específicos o deseas llegar a destinos fuera del alcance del transporte público.
- Funicular: Lyon cuenta con funiculares que conectan las partes más altas y bajas de la ciudad, como Fourvière y Vieux Lyon. Son útiles para acceder a lugares elevados y ofrecen vistas panorámicas.
Mapa de Lyon con los principales puntos de interés para visitar y sitios donde comer:
Con esto terminamos nuestra propuesta de plan para recorrer la ciudad de Lyon y sus alrededores. ¡Esperamos que disfrutes de la visita!
- diciembre 21, 2023