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Portugal es un país con mucho encanto gracias a zonas como Cascais. Aunque dicha ciudad cuenta con una superficie de 97,4 kilómetros cuadrados, es posible visitarla en un solo día. Eso sí, para ello necesitas una buena planificación como la que verás a continuación. Si te sobra tiempo, no dudes en acudir a alguno de los pueblos más bonitos que mencionamos en el artículo sobre qué ver cerca de Cascais.
Lugares imprescindibles que debes visitar en Cascais:
Empieza la jornada turística de la mejor manera posible, es decir, explorando el Casco Histórico. Estamos ante un cautivador y encantador laberinto de calles empedradas y plazas adoquinadas que evoca la rica historia y el carácter auténtico de esta pintoresca ciudad costera portuguesa. Ubicado a lo largo de la costa del Atlántico, el centro histórico de Cascais ha sido testigo de siglos de eventos y transformaciones, lo que ha dejado una huella indeleble en su arquitectura, cultura y ambiente general.
Las estrechas callejuelas del centro histórico están repletas de edificios antiguos con fachadas de colores vivos, típicas de la arquitectura portuguesa. En cada esquina, se descubren plazas acogedoras y encantadoras, algunas de las cuales están rodeadas de cafeterías al aire libre y pequeñas tiendas boutique. El ambiente relajado y acogedor del centro invita a los visitantes a perderse en sus callejones, explorando rincones ocultos y sumergiéndose en la autenticidad de la vida local.
La Praça 5 de Outubro es el corazón del centro histórico, una plaza animada rodeada de edificios históricos, incluido el Ayuntamiento de Cascais, que agrega un toque de majestuosidad al entorno. Desde aquí, las estrechas calles adoquinadas serpentean hacia afuera, llevando a los visitantes a lugares emblemáticos como la Iglesia de la Asunción, un hermoso ejemplo de arquitectura religiosa que data del siglo XVI, con su fachada ornamentada y su interior decorado.
Caminando por el centro histórico, es posible encontrar numerosas tiendas que venden artesanías locales, cerámica y productos gourmet, lo que brinda a los visitantes la oportunidad de llevarse a casa auténticos recuerdos de su experiencia en Cascais. También hay una variedad de restaurantes tradicionales y modernos, donde los sabores portugueses se mezclan en platos irresistibles que capturan la esencia culinaria de la región.
A continuación ve al Palacio Condes de Castro Guimarães. En nuestro artículo sobre qué ver en Sintra en 1 día ya lo mencionamos. Y no es para menos, puesto que estamos ante una joya arquitectónica y cultural anclada en la hermosa ciudad costera de Cascais. Se alza como un testimonio tangible de la opulencia histórica y la elegancia aristocrática que han dejado una huella duradera en la región. Este palacio, cuya construcción se remonta al siglo XIX, es mucho más que un simple edificio: es un portal al pasado, una galería de arte y un santuario de conocimiento que ilumina la rica historia y el patrimonio de la zona.
La estructura del Palacio Condes de Castro Guimarães es una fusión impresionante de estilos arquitectónicos, con influencias neogóticas y románticas que se entrelazan para crear una fachada que evoca una sensación de encanto y grandeza. Los detalles ornamentados, las torres y las ventanas arqueadas agregan un toque majestuoso al edificio, atrayendo la atención y el asombro de los visitantes desde lejos.
El palacio debe su nombre a la familia Castro Guimarães, una influyente familia portuguesa, y su historia está entrelazada con la de la región de Cascais. A lo largo de los años, el palacio ha cambiado de manos y ha albergado a varias personalidades, cada una dejando su marca en la estructura y la decoración del edificio. El resultado es una rica amalgama de estilos y elementos que cuentan la historia de quienes han habitado y cuidado este majestuoso lugar.
En el interior del Palacio Condes de Castro Guimarães, los visitantes se sumergen en un mundo de lujo y cultura. Las habitaciones y salones están decorados con muebles elegantes, obras de arte y objetos ornamentales que reflejan la opulencia y el refinamiento de la época. Las chimeneas ornamentadas, los tapices elaborados y las pinturas en las paredes evocan una sensación de esplendor y evocan la vida de la aristocracia del siglo XIX.
El palacio también alberga una biblioteca impresionante, que contiene una colección diversa de libros raros y valiosos, así como documentos históricos que abarcan una variedad de temas. Esta biblioteca no solo es un tesoro para los amantes del conocimiento y la historia, sino que también proporciona un espacio tranquilo y enriquecedor para la investigación y el estudio.
Uno de los aspectos más fascinantes del Palacio Condes de Castro Guimarães es su ubicación privilegiada cerca de la playa. Los jardines que rodean el palacio son un oasis de belleza natural, con senderos sombreados, áreas de descanso y vistas panorámicas del océano Atlántico. Los visitantes pueden pasear por los jardines, relajarse en medio de la exuberante vegetación y disfrutar de momentos de tranquilidad mientras contemplan las olas del mar.
El palacio también desempeña un papel importante en la escena cultural de Cascais. Alberga exposiciones temporales de arte y eventos culturales que enriquecen la vida de la comunidad local y atraen a visitantes de todas partes. El contraste entre la grandiosidad arquitectónica y la vitalidad creativa del palacio crea un ambiente único que celebra tanto el pasado como el presente.

Acto seguido dirígete a la Playa de la Reina. Se trata de uno de los lugares que recomendamos en nuestro artículo sobre qué ver en Cascais con niños. Encarna la esencia misma de la serenidad y la belleza natural que hacen de esta ciudad costera un destino tan atractivo para los amantes del mar y la relajación. Situada en un entorno pintoresco y enmarcada por acantilados escarpados, esta playa es un tesoro escondido que cautiva a los visitantes con su encanto y su ambiente tranquilo.
El nombre de la Playa de la Reina proviene de la Reina María Pía de Saboya, quien solía disfrutar de esta hermosa franja de arena y aguas cristalinas. Su legado real confiere a la playa un aire de elegancia y distinción que se refleja en su entorno y en su atractivo estético. Rodeada por altos acantilados cubiertos de vegetación, la playa ofrece una sensación de privacidad y aislamiento, lo que la convierte en un refugio perfecto para aquellos que buscan escapar del bullicio de la vida cotidiana.
El paisaje que rodea la Playa de la Reina es simplemente impresionante. Los acantilados que se alzan majestuosamente sobre la costa crean un telón de fondo dramático y visualmente impactante. A medida que el sol se pone en el horizonte, las rocas y la arena adquieren tonalidades doradas y rosadas, creando un espectáculo natural que atrae a los amantes de la fotografía y a aquellos que simplemente desean contemplar la belleza del mundo que les rodea.
Las aguas cristalinas y tranquilas son ideales para nadar y refrescarse, y el sonido suave de las olas acariciando la costa añade una nota de calma y tranquilidad al ambiente. A pesar de su relativa intimidad, la playa es popular entre los lugareños y los visitantes por igual, creando una atmósfera acogedora y sociable.

Finalmente, siguiendo la temática marinera no te puedes perder el Faro de Santa Marta. Este faro, ubicado en un promontorio rocoso cerca de la desembocadura del río Tajo, no solo cumple su función práctica como una ayuda a la navegación, sino que también encierra una historia fascinante y un legado cultural que trasciende su función original.
La construcción del Faro de Santa Marta se remonta al siglo XVII, cuando fue erigido por orden del rey João IV de Portugal. Su ubicación estratégica, en un punto donde las aguas del Atlántico se encuentran con la desembocadura del río Tajo, lo convirtió en un faro crucial para la navegación de los barcos que se dirigían hacia Lisboa y otros puertos de la región. Durante siglos, este faro sirvió como una guía confiable para los navegantes, ayudándoles a sortear las peligrosas aguas y las traicioneras corrientes de la costa.
La estructura arquitectónica del Faro de Santa Marta es cautivadora por sí misma. El faro está ubicado en un edificio de forma cilíndrica que presenta una combinación de piedra y ladrillo, una estética que refleja la sensibilidad arquitectónica de la época en que fue construido. La torre se eleva con dignidad sobre el paisaje, su luz destellante marcando el camino seguro para los marinos que se aventuran en alta mar.
Hoy en día, el Faro de Santa Marta sigue en funcionamiento, guiando a los barcos a través de las aguas del Atlántico y preservando su rol histórico como una conexión tangible con el pasado marítimo de la región. Además de su función primaria, el faro también atrae a visitantes que desean experimentar su aura histórica y disfrutar de vistas panorámicas impresionantes de la costa y el océano desde su plataforma de observación.

Si prefieres realizar un tour guiado por la ciudad y no perderte nada de la historia y las curiosidades de los lugares emblemáticos, puedes hacer un free tour que, desde TipsViajeros, te recomendamos fervientemente:
Recomendaciones para comer en Cascais ese día:
Puedes disfrutar de una amplia variedad de platos tradicionales típicos en Cascais, tales como:
- Sopa de peixe à moda de Cascais: Una deliciosa sopa de pescado elaborada con una variedad de pescados frescos, mariscos y verduras. Es un plato reconfortante y sabroso.
- Amêijoas à Bulhão Pato: Almejas cocinadas con ajo, cilantro, limón y aceite de oliva. Este plato es popular en toda la región de Lisboa y también se encuentra en Cascais.
- Filetes de pescado a la portuguesa: Básicamente son unos filetes de pescado fresco cocinados con ajo, cebolla, tomate y aceite de oliva. Es una preparación simple pero llena de sabor.
- Bacalhau com natas: Un gratinado de bacalao con crema, patatas y cebolla, a menudo cubierto con queso. Aunque no es un plato exclusivo de Cascais, es muy popular en toda Portugal.
- Doce de Cascais: Un dulce tradicional que puede variar, pero a menudo consiste en una mezcla de almendras, huevo, azúcar y limón, horneada hasta obtener una textura suave y cremosa.
Si quieres que te recomendemos lugares para comer, estos son algunos de los restaurantes mejor valorados de la ciudad:
- Taberna Económica de Cascais: Si la relación calidad-precio es lo que más importancia tiene para ti, no te lo pienses dos veces. La Taberna Económica de Cascais es el restaurante que más te gustará, porque la comida es realmente buena y el precio a pagar por ella no es excesivo.
- Baía do Peixe: Un acogedor restaurante de atmósfera relajada, donde una encantadora terraza te brinda vistas panorámicas al mar. Aquí podrás disfrutar de auténticos platillos portugueses preparados con pescados frescos y deliciosos mariscos.
- Entráguas: Si el precio caro no es un impedimento para ti, el mejor restaurante de Cascais es el conocido como Entráguas. No solo la comida es deliciosa, sino que la decoración también entusiasma a los comensales.
Cómo moverse por Cascais durante tu visita:
Cascais cuenta con una amplia variedad de opciones de transporte para moverse por la ciudad y sus alrededores. Estas son algunas de las más recomendables:
- A pie: Cascais es una ciudad compacta, por lo que muchas de sus atracciones turísticas y lugares de interés están a poca distancia. Caminar es una excelente manera de explorar el centro histórico, el paseo marítimo y otras áreas cercanas.
- Bicicleta: Cascais cuenta con rutas ciclísticas y carriles para bicicletas que te permiten recorrer la ciudad y sus alrededores de manera segura. Puedes alquilar bicicletas en varias tiendas y empresas locales. Si tienes una buena resistencia, no dudes en apuntarte a este plan:
👉 Tour en bicicleta por el Parque Natural Sintra-Cascais
- Autobús: La red de autobuses públicos en Cascais es extensa y conecta la ciudad con lugares cercanos, como Sintra y Lisboa. Los autobuses son una opción económica para moverse dentro y fuera de la ciudad.
- Tren: El tren es una forma conveniente de viajar entre Cascais y Lisboa. La línea de tren costero conecta ambas ciudades y ofrece hermosas vistas panorámicas del mar. Los trenes son cómodos y frecuentes.
- Tranvía: El tranvía de Cascais (Tram 25) es una atracción turística en sí mismo. Ofrece un viaje pintoresco a lo largo de la costa desde Cascais hasta el centro de Lisboa, pasando por lugares de interés como Estoril y Belém.
- Coche de alquiler: Si prefieres tener más libertad y explorar áreas fuera del centro de Cascais, puedes alquilar un coche. Ten en cuenta que el estacionamiento puede ser limitado en el centro de la ciudad, especialmente durante la temporada alta.
- Traslados: Si prefieres una alternativa más privada, cómoda y rápida, lo mejor que puedes hacer es recurrir a los traslados:
Mapa de Cascais con los principales puntos de interés para visitar y sitios donde comer:
Con esto terminamos nuestra propuesta de plan para que la experiencia turística en Cascais sea inmejorable. ¡Esperamos que disfrutes de la visita!
- agosto 12, 2023