Ya de por sí Portimão tiene muchos atractivos turísticos, tal como vimos en su momento cuando hablamos sobre qué ver en Portimão en 1 día. Pero lo cierto es que si cruzas la frontera de dicho municipio, puedes dar con muchos otros lugares que también merecen la pena. Claros ejemplos son los pueblos que veremos a continuación.
Todos ellos se caracterizan por estar a poca distancia de Portimão . Precisamente detallaremos los kilómetros que hay que recorrer para llegar a los pueblos, así como los motivos que dan pie a que sea recomendable visitarlos, tanto solo como acompañado por adultos e incluso por infantes. De hecho, cuando en su momento en este mismo blog describimos qué ver en Portimão con niños, ya dimos a entender que toda la zona en general es ideal para ser disfrutada por los más pequeños de la casa.
Sagres

Uno de los aspectos más destacados de Sagres es su entorno natural espectacular. Rodeado por acantilados escarpados y playas vírgenes, ofrece un paisaje impresionante y se ha convertido en un paraíso para los amantes del surf y otros deportes acuáticos. La Playa do Beliche y la Playa do Tonel son especialmente populares entre los surfistas, mientras que la Playa de Mareta es una excelente opción para aquellos que buscan disfrutar de un día tranquilo en la playa. También puedes ver las preciosas aguas de la zona desde el cielo, apuntándote para ello en una actividad que nunca olvidarás:
👉 Vuelo en parapente por Sagres
Además de sus hermosas playas, Sagres también alberga lugares de interés histórico y cultural que hacen que sea un destino único para explorar. El Cabo de San Vicente es uno de los puntos más emblemáticos de la región, y ofrece vistas panorámicas impresionantes del océano Atlántico. En este cabo, se encuentra un faro que guía a los barcos a través de estas aguas desde hace siglos.
Otro lugar histórico destacado en Sagres es la Fortaleza de Sagres, una impresionante fortificación que data del siglo XV. Construida por orden del infante Enrique el Navegante, esta fortaleza fue un importante centro de navegación y estudio de la cartografía durante la Era de los Descubrimientos. Se cree que aquí se estableció la famosa «Escuela de Sagres», donde se formaron navegantes y exploradores que luego se aventurarían a explorar nuevos territorios.
Además de su importancia histórica, Sagres también tiene un ambiente relajado y encantador. A diferencia de otras zonas turísticas del Algarve, este lugar ha mantenido su autenticidad y no ha sido invadido por el turismo masivo. Esto lo convierte en un destino ideal para aquellos que buscan una experiencia más auténtica y tranquila en la costa portuguesa.
En cuanto a la distancia entre Sagres y Portimão, ambas ciudades están ubicadas en el Algarve, pero Sagres se encuentra en el extremo suroeste de la región, mientras que Portimão está más hacia el centro. La distancia aproximada entre Sagres y Portimão es de alrededor de 40 kilómetros, lo que equivale a unos 30-40 minutos en coche, dependiendo de las condiciones del tráfico.
Monchique

Llama la atención sobre todo su paisaje montañoso, dominado por la Serra de Monchique, una cordillera que ofrece vistas espectaculares de valles verdes y frondosos bosques. Los amantes del senderismo y la naturaleza encontrarán aquí un paraíso para explorar, con una amplia red de senderos que serpentean a través de la montaña y ofrecen oportunidades para descubrir cascadas, manantiales y fauna y flora autóctonas.
La villa de Monchique es el núcleo histórico y cultural del municipio, y es conocida por su encanto rústico y auténtico. Sus estrechas calles empedradas y sus casas de estilo tradicional portugués crean un ambiente acogedor y pintoresco. En el centro de la villa se encuentra la Iglesia Matriz de Monchique, una iglesia gótica del siglo XVI que es un importante punto de referencia histórico y religioso para los habitantes del pueblo. Estos y otros monumentos pueden ser explorados apuntándote a una visita guiada:
Además de su belleza natural y su patrimonio histórico, Monchique también es famoso por su producción de aguardiente de medronho, una bebida alcohólica tradicional elaborada a partir de la fruta del madroño, que es abundante en la región. Los visitantes pueden disfrutar de degustaciones de esta bebida local y aprender sobre su proceso de elaboración en las destilerías locales:
👉 Visita a una destilería de aguardiente de madroño
Monchique también ofrece una deliciosa gastronomía regional, con platos típicos que incluyen carne de cerdo asada, miel local y platos a base de productos frescos de la región. Los restaurantes y tascas de la zona ofrecen una variedad de opciones para satisfacer todos los paladares.
Sines

Sines es una encantadora ciudad costera ubicada en la región de Alentejo. Con una rica historia marítima y un paisaje natural impresionante, Sines se ha convertido en un destino popular para aquellos que buscan disfrutar de playas vírgenes, sumergirse en la cultura portuguesa y explorar su patrimonio histórico.
Uno de los aspectos más destacados de Sines es su hermosa costa, que cuenta con kilómetros de playas de arena dorada bañadas por el océano Atlántico. Las playas de Vasco da Gama, São Torpes y Porto Covo son algunas de las más populares y ofrecen oportunidades para nadar, practicar deportes acuáticos y disfrutar del sol y el mar. Estas playas también son famosas por su belleza natural y su ambiente tranquilo, lo que las convierte en un refugio ideal para aquellos que buscan relajarse y escapar del bullicio de la vida cotidiana.
El patrimonio histórico de Sines es otro atractivo para los visitantes. La ciudad es conocida por ser el lugar de nacimiento de Vasco da Gama, el famoso explorador portugués que abrió la ruta marítima desde Europa a la India. La casa natal de Vasco da Gama, que se ha convertido en un museo, es una parada obligada para aquellos interesados en la historia marítima de Portugal y la época de los descubrimientos. Además, el Castillo de Sines, que data del siglo XVI, ofrece impresionantes vistas panorámicas de la ciudad y el mar, así como una visión de la historia defensiva de la región.
La cultura y la tradición portuguesa están muy presentes en Sines. La ciudad es famosa por sus festivales y eventos culturales, que atraen a turistas y locales por igual. El Festival Músicas do Mundo, que se celebra en julio, es uno de los festivales más destacados de Sines y presenta música de todo el mundo en un ambiente vibrante y festivo. Además, la gastronomía local es una delicia para los amantes de la comida, con platos de pescado fresco y mariscos que reflejan la rica tradición pesquera de la región.
Almodôvar

Esta encantadora villa es conocida por su encanto rural, su rica historia y su tradición cultural, lo que la convierte en un destino ideal para aquellos que buscan explorar la auténtica vida portuguesa y disfrutar de la tranquilidad del campo.
El paisaje que rodea a Almodôvar es uno de sus mayores atractivos. Con extensos campos, colinas onduladas y viñedos, esta región es un remanso de paz y belleza natural. Los amantes del senderismo y la naturaleza encontrarán en Almodôvar numerosas rutas para explorar, que les permitirán gozar de la flora y fauna autóctonas y deleitarse con las impresionantes vistas panorámicas de la campiña alentejana.
El patrimonio histórico de Almodôvar también es una faceta interesante para los visitantes. La ciudad cuenta con un pasado que se remonta a la época romana, y sus calles empedradas y edificios históricos reflejan la rica historia de la región. La iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Concepción, con su hermosa fachada y su interior decorado, es un ejemplo destacado de la arquitectura religiosa local.
Además, el Castillo de Almodôvar, que data de la época medieval, es otro punto de interés histórico que ofrece una mirada a la historia defensiva de la villa. Situado en la cima de una colina, el castillo ofrece impresionantes vistas del paisaje circundante y es un lugar fascinante para aprender sobre el pasado de la región.
Olhão

Conocida por sus tradiciones pesqueras, su encanto auténtico y sus impresionantes paisajes, Olhão se ha convertido en un destino popular para los amantes del mar y aquellos que buscan sumergirse en la cultura portuguesa. Queremos destacar principalmente su puerto pesquero, que sigue siendo una parte central de la vida y la economía de la ciudad. Los coloridos barcos de pesca que alinean el puerto, junto con los pescadores que venden su captura fresca en el mercado local, crean una escena pintoresca y auténtica que refleja la tradición pesquera de la región. El Mercado Municipal de Olhão, también conocido como el Mercado da Ribeira, es un lugar imprescindible para los visitantes, donde pueden comprar pescado y mariscos frescos, así como productos locales y artesanía.
Las playas de Olhão son otro de los atractivos de la ciudad. La isla de Culatra, situada frente a la costa de Olhão, ofrece playas de arena blanca y aguas cristalinas, que son ideales para nadar, tomar el sol y relajarse en un ambiente tranquilo y natural. Además, las excursiones en barco a las islas cercanas, como la isla de Armona y la isla de Farol, son muy populares entre los visitantes y ofrecen oportunidades para explorar paisajes vírgenes y disfrutar de la belleza del entorno marítimo, incluyendo algún que otro delfín que puede ser avistado:
👉 Avistamiento de delfines en Olhao
El casco antiguo de Olhão es otro punto destacado para los viajeros. Sus calles empedradas, sus edificios tradicionales y sus plazas pintorescas crean un ambiente encantador y acogedor. La Iglesia Matriz de Nuestra Señora del Rosario, con su fachada blanca y azul, es una parada obligada para aquellos interesados en la arquitectura religiosa local.
Además, Olhão es famoso por su gastronomía, especialmente por sus platos a base de pescado y mariscos. Los restaurantes del pueblo ofrecen una variedad de platos deliciosos, como el «cataplana», un guiso de mariscos cocinado en una olla tradicional de cobre.
La distancia aproximada entre Olhão y Portimão es de unos 85 kilómetros, lo que equivale a algo más de una hora yendo en coche. Hacer el trayecto merece mucho la pena.